Jueves...
Hoy día te vi. No me costó distinguirte entre la gente que caminaba por ahí a esa hora, apenas te vi una sonrisa apareció en mi cara, una sonrisa que nadie podría borrar excepto yo misma. Te besé y te abracé como si no te hubiera visto en años, me porté cariñosa contigo incluso te dije que te quiero, cosa que no hago a menudo por mis propias inseguridades y miedos.
No me preguntes porque me siento así cuando estoy contigo, pero lo siento. Cuando estamos juntas tu y yo se me olvida el resto del mundo... se me olvida que tengo novio, que estoy jugando con los sentimientos de dos personas. Me estoy arriesgando a algo que no me da nada de tranquilidad y como sabes, no quiero hacer las cosas mal.
Hoy día te dije que las cosas con mi novio no están funcionando como deberían y si no han muerto aún es porque él y yo somos buenos amigos. Y hay una idea que me cruza la cabeza que no me termina de gustar, pero se que es lo correcto y que debo hacerlo.
Te voy a hacer sufrir, lo se... esto te va a doler y mucho, pero debo hacerlo. Te voy a dejar, no puedo estar contigo ahora. Estoy tratando de enfocarme en otra cosa, en estudiar, ser la mejor en lo que hago y no puedo si estoy pensando en ti, entonces debo olvidarte, no sólo dejarte... olvidarte es necesario también porque te has metido tan profundo en mi corazón que no dejo de pensar en ti, de soñar contigo y no puedo permitírmelo.
Tienes que saber que no sólo voy a dejarte a ti, también a él, mi novio. Creo que ha llegado el momento de estar sola, sola conmigo misma, preocupada de mi y mi futuro.
Me da pena hacerlo porque he aprendido a quererte mucho y te agradezco porque me has enseñado muchas cosas a pesar de tu corta edad... No me queda mucho más que decirte que te quiero, que estoy feliz de haberte conocido, que siempre voy a estar contigo cuando me necesites y siempre voy a ser tu amiga, aunque no sea más que eso.
La tristeza que viste en mis ojos en la tarde es por esto, porque fue nuestra ultima reunión como pareja, como amantes, porque si nos volvemos a encontrar va a ser como amigas, ya no más con esos besos capaces de robar el aliento.
4 días después.
Mentí cuando dije que sería la última vez que te veía... Hoy te vi de nuevo, pero no ha sido lo mismo de siempre. Hoy tuvimos que escondernos y cuando quise besarte, me corriste la cara y me recriminaste que una amiga de tu mamá estaba por ahí.
A eso es lo que me refiero cuando digo que esto entre nosotras no va a funcionar, no puedo vivir así, escondiéndome y es por eso que a pesar del cariño que siento por ti no puedo estar contigo. Debo rechazar lo que siento por ti, olvidarlo, por más que te quiera.
Es cierto hoy día estaba muy cansada, pero de todas formas no es por eso que te traté como te traté. Es por lo que conversamos, no fui capaz de decirte, una vez más, lo que se supone que estoy diciendo con estas palabras que escribo aquí en este papel. Soy tan cobarde que no puedo decirte que no quiero estar contigo, porque me hace mal. Es más, cada vez que te veo recuerdo la forma en que nos juntamos, se que tu también: siempre fue un engaño. Y nuestra relación no puede trascender a eso, porque ambas sabemos que todo nació de una infidelidad y por una infidelidad se puede acabar, ambas sabemos que tanto tu como yo somos capaces de hacer algo así de nuevo si se da la oportunidad como la que se dio ese día cuando nos besamos por primera vez.
Odio esto... no quiero decirte esto porque se que te haré daño, pero no puedo callarme porque me hago mil veces más daño a mi misma. Te lo diré alguna vez, te confesaré que a pesar de que me encanta el sabor de tus labios, el olor de tu cuello, el tacto de tus manos, no puedo amarte, nunca podré, porque nuestra relación nació de un engaño y no puedo creer en que nosotras podamos ser felices a pesar de eso. Porque no se a ti, pero a mi me pesa mucho en la conciencia, a tal punto que aún no creo que pueda perdonarme el haber traicionado la confianza del hombre que más me ha amado nunca, mi novio.
He dicho que lo voy a dejar, pero no estoy segura, él me ha probado que sabe como hacerme feliz y confío en que puedo vivir con él por mucho tiempo más como pareja y que siempre podré terminar con él en buenos términos, siendo amigos... como ha sido una constante en todas mis relaciones, siempre he conseguido mantener un contacto con la gente que ha habitado mi corazón. Ya conoces el caso de mi primera novia y yo, seguimos conversando, somos amigas. Además de tu ex, a quien ya sabes conquisté dos veces seguidas, y a pesar de romperle el corazón en ambas ocasiones, seguimos siendo amigas. Me gustaría que contigo fuera así también, pero no se... siento que no lo quieres.
Aún no se si terminaré con mi novio, pero es algo que estoy pensando, con mucha paciencia, mirando desde distintos ángulos todo lo que pueda pasar a partir de esta decisión. A pesar de lo que pase con eso, debes saber que no estaré contigo como pareja, no puedo, no me siento bien haciendo esto. Además que me arriesgo a una demanda en mi contra por parte de tu familia, si ellos se enteran que tu y yo estamos saliendo me pueden acusar de muchas cosas por ser tu menor de edad, ¿qué puedo hacer yo contra eso? Simplemente nada, no tengo dinero para pagarme un abogado, no tengo ánimos para enfrentarme ni a tu madre ni a tus abuelos ni a un tribunal, no puedo.
Y por eso puede ser también mi cobardía, me arriesgo a mucho al andar contigo por ahí como si nada. Estoy siendo fría, lo se, pero debo hacerlo, sino no podré salir de esto con vida. Necesito sobrevivir, esto es como la ley de la selva, la supervivencia del más fuerte y esta vez, necesito ser una luchadora, sobrevivir a toda costa.
Como te dije, estudiar es una prioridad y lo cumpliré porque siento como cambia algo dentro de mi, me estoy volviendo una mujer de verdad y perdona que te lo diga, tu aún eres una niña, disfruta de tu vida adolescente un poco más, sal a fiestas, embriágate si quieres, besa a quien tu quieras, ¡se libre! No te amarres a nadie todavía con algo serio, crece, y luego podremos hablar de comenzar una relación seria. Se feliz, es todo lo que tengo que decirte.