Capitulo VII: El final
-“Y dime ¿Qué paso?"-preguntó un beyluchador a su amigo pelinaranaja.
-“Recuerda que te dije que no te lo contaría”-respondió-“No te gustaría saberlo Garland-kun”-
-“Pero si quiero y no soy el único”-junto a él estaban Tyson, Max, Ray, Mystel, Ming Ming, Crusher, Tala y Bryan.
-“Si no se van en este mismo momento de esta habitación van a sufrir, irremediablemente, mi ira”-amenazo alguien desde una camilla de hospital.
-“No, ya se despertó el amargado”-dijo con tono de burla Tyson.
-“Hablo en serio bola de grasa con patas”-reitero molesto.
-“Vamos Kai, respira hondo y relájate”-le aconsejo el pelinaranja.
-“¿Cómo quieres que me tranquilice con 9 imbeciles en esta habitación?”-pregunto evidentemente enfadado.
-“Buena pregunta”-debió admitir-“¿Chicos, nos dejan a solas por media hora, mínimo?”-pidió amablemente con una sonrisa y los chicos tuvieron que aceptar saliendo en fila del cuarto, decidieron ir a almorzar juntos ya que tenían la oportunidad.
-“Bien Brooklyn, cuéntame lo que paso”-pidió.
-“A decir verdad… lo que paso después de que tu perdiste el conocimiento en mi mente esta todo borroso y hay algunas partes que no entiendo”-confeso.
-“Cuéntame lo que entiendas”-pidió el bicolor.
-“Bien, apenas cerraste los ojos yo sentí como si toda la fuerza que tenia se desvaneciera y grite tu nombre, me sentí realmente como si estuvieras ya en el otro mundo, lo único que quería en aquel momento era que todos desaparecieran pero ese maldito lanzo otra bala muy cerca que me saco de ese pensamiento. Estoy seguro que cuando lo mire tenia una expresión realmente fiera porque tu abuelo retrocedió nervioso al igual que le otro sujeto”-hizo una pausa muy corta para tomar una bocanada de aire-“Veamos, lo demás que recuerdo es haberme lanzado hacia Voltaire sin importar que me matara, escuche dos disparos mas pero como ves estoy en perfectas condiciones así que supongo que fallaron los tiros. Lo siguiente que recuerdo es tener yo la pistola en mis manos y apuntar a quien te había “matado”, jale del gatillo y por el ángulo le dio en el pecho así que creo que lo mate”-dijo aunque esto no sorprendió a Kai, que escuchaba atento-“Luego… es algo confuso pues no recuerdo como llegue al hospital ni como me libre de los dos tipos, bueno, seguramente se asustaron”-
-“Bueno, pero el punto es que llegaste y que ninguno de los dos esta muerto”-dijo Kai intentando borrar es semblante triste en el rostro de su “koi”-“Bien, tenemos diez minutos hasta que regresen y 20 si tenemos suerte¿Qué quieres hacer?”-le pregunto visiblemente aburrido.
-“No se, no hay mucho que hacer en un hospital y menos con las heridas que tienes”-
-“Es verdad”-acepto.
-“Kai”-llamo al verlo ensimismado en sus pensamientos-“Me puedes contar algo de tu pasado, pero algo que no te ponga triste¿si?”-pregunto.
-“¿Quieres saber del día que conocí al loco de Bryan y al psicópata de Tala?”-pregunto.
-“Si, pero no deberías referirte así de tus amigos”-opino pero a decir verdad le divertía la forma en que siempre le ponía apodos a la gente.
-“Bien, veamos… ”-le contó y a decir verdad me da flojera escribirlo, y si lo hago el capitulo seria demasiado largo. Simplemente digamos, que pasaron un rato divertido.
A las tres semanas le dieron de alta y ahora vive con Brooklyn y Garlan, solo que hay mas rumores en la escuela de lo que el trío quisiera.
-“Preferiría seguir en el hospital”-opino Kai deprimido en su pupitre.
-“No es para tanto”-dijo el pelinaranja muy sonriente como de costumbre.
-“Si lo es, quiero morir”-
-“Bueno, todo volvió a la normalidad”-se dijo tranquilamente Brooklyn.
-“¿Tu a que le llamas normal?”-pregunto molesto Tala-“Primero, viven juntos y no se pelean, segundo, Voltaire desapareció y nadie tiene idea de que rayos paso con él, mientras Kai le toma tanta importancia como a Tyson, tercero, Bryan, oíme bien, Bryan, esta saliendo con Ray, Kenny con la mal cantante de Ming Ming, la gritona de Hilary con el regordete y tonto de Tyson y el idiota exageradamente feliz de Max se la pasa con Mystel cada puto momento ¡¿Eso te parece normal?!”-pregunto muy alterado casi al punto de arrancarse el cabello con sus propias manos o suicidarse en el peor de los casos.
-“Si”-contesto simplemente el pelinaranja logrando que el pelirrojo al fin explotara.
-“¡Eres un imbecil¡¿El mundo se volvió loco o que¡¡Alguien explíqueme!!”-pidió desesperadamente, ya tenia las manos en la cabeza sosteniéndosela.
-“Yo te explico loco exagerado”-dijo el bicolor aburrido a pesar del escándalo que su “amigo” estaba causando-“En primera¿a vos que te importa si vivo o no en la casa de Brooklyn? Ese es problema mío y de Brooklyn como lo de que no nos peleamos, en segundo tienes, razón, me importa un rábano lo que le haya pasado a Voltaire, y tercero, lo de esas parejitas ya se sabia desde hace tiempo y mas lo de la gritona con el imbecil, son mas obvios que Kenny con Ming Ming, y lo de Ray y Bryan además de saberlo desde hace tiempo lo grabamos y publicamos en Internet, así que no es nuevo para nadie, y el ultimo, el de Mystel y Max, están de novios desde hace tres días pero desde el campeonato que se tienen ganas”-explico haciendo que Tala se tranquilizara un poco.
-“Bien, eso lo explica casi todo, excepto lo tuyo y el porque Garland parece como zombi”-
-“Es que no duerme desde no se cuando”-aviso Kai.
-“¿Por que?”-preguntó Tala.
-“Hacen mucho ruido”-murmuro Garland y los dos se sonrojaron-“Odio estar en la habitación de al lado”-agrego y se golpeo la cabeza contra el pupitre unas tres veces.
-“Con que era eso, debí imaginarlo”-se dijo a si mismo mirando a la parejita.
-“Mejor cállate o no veras la luz de nuevo”-amenazo Kai.
-“Como dije antes, todo volvió a la normalidad”-reitero Brooklyn, a la entrada de Bryan y Ray.
-“Se ve que se divirtieron”-comento Kai burlonamente al ver una linda marca roja en el cuello del neko (gato)
-“¿Por qué lo dices?”-pregunta nervioso Ray.
-“Por la marca en tu cuello”-respondió e inmediatamente su compañero trato de taparla “Si, normalidad” pensaba.
-“Eso no significa nada, es que… me golpee, si, eso”-intento dar como excusa pero nadie le creyó.
-“Dios”-murmuro Bryan que le importaba un huevo y la mitad del otro si toda la escuela se enteraba.
-“Y y digo que para que Ray salga con Bryan a de ser masoquista”-opino Tala.
-“Tal vez”-murmuraron Kai, Brooklyn y Garland.
-“¡No lo soy!”-grito verdaderamente avergonzado, nervioso y molesto.
-“No era para que gritaras, por cierto¿Por qué gritaste?”-pregunto un confundido Tyson entrando en el salón seguido de Hilary, Mystel y Max.
-“Porque le dijimos que para salir con Bryan debía de ser masoquista”-respondió Tala con una sonrisa arrogante y medio pervertida.
-“Y es por esa razón que no tienes novia Tala, actúas como un lunático”-opino Kai.
-“No me importa tener novia”-en eso llega una chica que parecía ser de un curso inferior de cabello castaño recogido en un moño alto y ojos color miel, con expresión de niña buena-“Este… nos vemos”-dice antes de salir corriendo llevándose a la chica consigo.
-“Eso fue raro”-opinaron todos. Y después de charlar por al menos diez minutos todo el timbre y se reanudaron las clases. Al finalizar cada uno se fu como siempre, exceptuando a Garland que se fue con Bryan, Mystel, Ray y Max a una fiesta.
-“Parece que tendremos la casa para nosotros solos esta noche”-le dice Brooklyn sensualmente al oído.
-“No”-negó como sabiendo que seguiría a eso-“Llevo diciéndotelo¡cuando yo quiera!”-
-“Bien, pero te tardas en decidir”-reprocha entre molesto y divertido por el sonrojo que había logrado en el rostro del bicolor.
-“Si, lo se”-a los minutos llegan a su casa y luego de cenar, Kai como de costumbre se dio una ducha rápida mientras que Brooklyn planeaba algo. Cuando el primero salio del baño solo con una toalla en la cintura (N/A: - ) y el pelo completamente mojado se encontró con que cierto ojiazul había apagado las luces-“Brooklyn, lo intentaste hace tres días y no te funciono ¬o¬”-le recordó algo fastidiado pero no recibió respuesta, apenas puso un pie en la habitación fue casi lanzado a la cama-“No te funciona… ”-y no pudo terminar su frase porque sus labios fueron apresados por los del mayor (N/A: Aunque en mi historia ambos tienen la misma edad, pero Brooklyn es mas alto XD) en un suave y tierno beso “Pero esto si le funciona” pensaba respondiendo a su beso que no tardo en convertirse en uno salvaje y demandante-
-“¿Aun después de esto me dirás que no?”-pregunto cuando se termino, aunque no lo dejaba moverse libremente apresándolo contra la cama, así que no tenia escapatoria-“¿No confías en mi?”-pregunto con un tono triste.
-“Claro que confió en ti… simplemente yo… ”-no sabia que decir, siempre le respondía que no pero no podría hacerlo por siempre, hay que afrontar los temores-“No le contaras a nadie, ni a Garland”-agrego con una sonrisa, sabia que entendería la indirecta.
-“No te preocupes por eso, no lo sabrá, solo nosotros dos”-susurro a su oído causándole un escalofrió, pero pronto comenzó a morderle y a succionar el lóbulo arrancándole varios suspiros, cuando paso a su cuello y clavícula haciendo lo mismo obtuvo el mismo resultado, claro que comenzó a dejarle marcas muy parecidas a las de Ray, y mas notorias por ser la piel del bicolor en exceso blanquecina. Sin esperar mucho le quito la toalla dejando ver que ya estaba excitado-“Ju… eso fue rápido”-Murmuro comenzando a lamer su erección logrando que aquellos susurros se convirtieran en potentes gemidos, que se intensificaron mas cuando tomo su miembro en su boca en un vaivén lento y tortuoso.
-“Ahhh… Brooklyn… por favor… ”-logro articular entre gemidos desesperados y Brooklyn haciéndole caso aumento el ritmo. Kai se aferraba a las sabanas fuertemente y mantenía los ojos firmemente cerrados, su corazón latía más rápido que nunca y sus mejillas estaban notoriamente sonrojadas, bastaron escasos minutos para que el bicolor se viniera en la boca de Brooklyn junto con un grito ahogado, dejándolo exhausto y el pelinaranja tragándoselo todo para luego besarlo en los labios comenzando a quitarse la ropa, en especial el pantalón, sintiéndolo demasiado apretado.
-“Aun no terminamos”-le susurra al oído mientras se lamía lujuriosamente los dedos.
-“Lo… se”-dijo con el poco aliento que tenia abriendo ligeramente los ojos.
-“Cuando estés listo… ”-no termino de decirlo pues Kai lo beso atrayéndolo.
-“Hazlo de una vez”-le ordeno, quien sabe si fue por la desesperación o por que otra cosa. Y haciéndole caso separo sus nalgas e introdujo uno de sus dedos, obteniendo un quejido por parte de Kai. Y sabía muy bien que se estaba conteniendo de insultar y todo eso. Cuando sintió que se había acostumbrado un poco introdujo el segundo e hizo lo mismo con el tercero, moviéndolos un poco para que su cuerpo de adaptara y sin previo aviso los retiro y embistió con su miembro de una vez escuchando claramente como Kai gritaba por el dolor. Se mantuvo así hasta que Kai se acostumbro a la invasión. Este a su vez trataba de relajarse un poco, sabia que dolería mas si no lo hacia. Cuando se sintió listo movió un poco las caderas que estaban sobre las piernas de Brooklyn indicándole que siguiera. Y este comenzó dando leves embestidas aumentando el ritmo rápidamente escuchando como su “amante” gemía, y no precisamente por el dolor sino por el placer que le causaba sentirlo en su interior. El dolor de la primera embestida fue dejado completamente atrás.
Pronto no solo Kai gemía sino también Brooklyn quien comenzaba a embestir cada vez mas rápido y mas profundo. Tratando de tocar aquel punto que haría que Kai gritase de puro placer. Y luego de varias estocadas el cuerpo de Kai se arqueo y ahogo un grito, Brooklyn se detuvo un momento al ver aquella reacción y entonces siguió embistiéndole tocando aquel punto recién encontrado descontroladamente escuchando como gemía cada vez mas y mas alto, casi al punto de gritar. Y el tampoco se contenía el placer que le causaba estar dentro de la persona que amaba era indescriptible y le provocaba gemir sin control. Un par de estocadas más y termino viniéndose en el interior del ojivioleta, este a su vez entre ambos, los dos gritando el nombre de la persona junto a él, el nombre de la persona amada, cayendo rendidos, Brooklyn saliendo lentamente de él y recostándose al lado abrazándolo protectoramente.
Luego de unos minutos recuperando el aliento, uno de ellos se decidió a hablar.
-“Brooklyn”-lo llamo con la poca fuerza que le quedaba.
-“¿Si?”-pregunto el otro en igual estado.
-“Te amo”-murmuro con una leve sonrisa en su rostro mirándole tiernamente.
-“Yo también, Kai”-dijo y unió una vez mas sus labios con los de Kai, en un leve y tierno beso, que demostraba que aquellas palabras eran ciertas. Abrazándolo más fuerte, el bicolor recargo su cabeza en su pecho y se abrazo también a él, quedándose profundamente dormido en sus brazos.
A la mañana siguiente despertaron, diría agradablemente pero…
-“Brooklyn, santo dios, si iban a hacer eso mínimo hubieras cerrado la puerta”-dijo divertido Garland mientras veía que Kai lo miraba como diciendo “te mataría si pudiera” desde la cama tapado hasta la cintura.
-“Garland, mejor no digas mas o vas a molestarlo”-dijo, había corrido para encontrar donde había dejado el pantalón y ponérselo apenas vio a Garland XD.
-“Por cierto, abajo están Bryan, Mystel, Ray y Max, es que anoche se emborracharon demás y no podían casi caminar así que tuve que pedir un taxi y traerlos acá, porque la otra opción era dejarlos que hicieran lo que quisieran y mejor no hacer eso ultimo, hubieran terminado en la estación de policías”-contó mientras evitaba reírse recordando como Brooklyn se había caído buscando el bendito pantalón y Kai tratando de taparse y salvar un poco de su dignidad-“Cuando quieran bajen a desayunar”-finalizo y se fue.
-“Bueno, pudo ser peor”-murmuro Brooklyn.
-“¿Como?”-pregunto molesto Kai.
-“Podrían haber entrado los otros”-respondió.
-“Tienes razón”-admitió mientras se paraba aun con las sabanas tapándolo, y buscando algo de ropa.
-“¿Adonde vas?”-pregunto seductoramente, aun tenia varias ideas en mente XD.
-“A bañarme”-respondió, sin mirarlo.
-“¿Te acompaño?”-pregunto con lujuria, el bicolor se volteo ya con la ropa en mano.
-“Si quieres”-fue la respuesta y ambos entraron en el baño, se divertirían un rato mas antes de tener que regresar a la rutina de siempre. Esta vez juntos y seguros de que nada lograría separarlos, ni los celos, ni el odio, las adversidades, nada porque no se guardarian secretos.
- - Fin - -
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