El dolor de ilusionarse
Besos que Lastiman
Desde aquél día; desde aquella vez; Sasuke le besaba, sin razón aparente, y en cualquier lugar, a cualquier hora del día… Pero únicamente cuando estaban solos.
Lo efectuaba de la manera más cruel, pasional y complaciente que Naruto conociera.
Cada vez que el orgulloso Uchiha rozaba apenas los labios del inocente rubio; éste sentía una descarga eléctrica que rodeaba su pequeño cuerpo. La cual, acrecentaba conforme los días pasaban, sin indicios de desvanecerse; sin querer disiparse.
Pero esto era involuntario… (¿O no?)
Naruto estaba consiente que todo era una farsa, una burla mal ejecutada.
Ambos estaban en la adolescencia, época en que las hormonas se conducían por si solas. Lo que significaba, que no existían emociones de por medio.
De ningún modo aparecerían, y no tenía la esperanza que alguna vez lo hicieran.
¿Y que? Al principio no le importaba en lo más mínimo; era sólo un beso, un intrascendente gesto que no valía siquiera el desgaste de tiempo que invertía repasándolo.
Tal vez; le molestaba un poco. Después de todo ¡Eran hombres! Llegaba a incomodarle.
Pero; ahora.
Se preguntaba porque estaba enamorado del errado; ¡y porque lo había “preferido” a él! Habiendo tantas personas en el mundo ¿Por qué habría de ensañarse solamente al rubio? El cual, tenía un sentimiento de amor escondido, dudoso; por Sasuke. Jamás creyó que ese estúpido estremecimiento despertaría en su totalidad.
No quería amarlo; sabía la congoja que conllevaba.
Sin embargo, ahora que ya era tarde para desenamorarse, le gustaba soñar que lo anterior era una ejemplo de cariño; Una muestra de que Naruto le gustaba, y el amor era mutual.
Aunque, simplemente era una mentira…
Se ilusionaba; con besos que lastimaban.
...
¡Que sufrimiento!.... ¿Por qué habría de ser tan ingenuo?
Si tan sólo supiera todo lo que Sasuke le amaba…
(Su pequeña e inexperta lengua; similar a mil suaves pétalos de gardenia)
No obstante, era imposible ver a través de su barrera de odio. Incluso para el Uzumaki; que le conocía mejor que nadie…
La barrera que hacía que la boca del pelinegro supiera a hiel, pero a la vez se sintiera insípida, fría… melancólica
El cariño, era una faceta que nadie; absolutamente nadie le conocería nunca. Ni siquiera la persona que más quería…
Su ser: despectivo toda la vida…
Algo que Naruto no aguantaba más.
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Le tenía frente de si; alzando una ceja déspotamente, retándolo con la mirada.
Muchas otras veces que quería manifestar su molestia se arrepentía en el preciso momento que posicionaba esa mueca; pero hoy, ya estaba fastidiado.
¡No sería un juguete más!
Apretó los nudillos en un símbolo de rudeza y reproche.
-¡Estoy harto Sasuke!-
-¿De que?- Le respondió desinteresado.
-¡Idiota!... De que me utilices… de que… -Hizo una pequeña pausa al creer que se ruborizaba y la voz le fallaba- de que me beses…-
El Uchiha no se perturbaba ni un poco.
-¿Por qué? ¿Acaso tienes algún problema?-
¡Además de despectivo, cínico! ¡Era el colmo!
-¡Maldito!... ¡Por supuesto que lo tengo!… A ser de otra manera; callaría…-
Al empiece de sus planes, pensaba arreglar todo de buena manera; tal vez, así le aceptaría y estarían juntos… Una ideología muy positiva… pero en éste momento, la poca paciencia que conservaba se había ausentado.
-¿Y cual es la solución?- Sasuke lograba sacarlo de sus casillas.
-¡Pues que dejes de hacerlo!-
Por fin estaba encarándolo. Y sus precisos ojos, cual cielo matutino, estaban repletos de ira, coraje, ¡tanta rabia! Las lágrimas estaban cerca de surgir; aguardaban impacientes el momento de desembocarse.
Pero; del otro lado, el pelinegro bufaba molesto.
-Lo hubieras dicho antes, y nos hubiésemos ahorrado esta superflua conversación-
Y con esa vil respuesta le dio la espalda al chico; mismo que estaba en shock.
Esperaba una contestación no más amable, pero si menos delicada.
Al menos una que no le vulnerara tanto.
-¡SASUKE!- gritó fuertemente jalando del brazo al aludido. ¡Quizás si le rogaba!... ¡Posiblemente si se enteraba de su auténtico pensar!... -¡Tu; me gustas! ¡Te quiero!-
Paró en seco apenas terminó la repentina declaración, que aunque a pocas palabras, revelaba demasiado.
En su pálido rostro no había emoción alguna…
Le arrebató a Naruto el brazo que había tomado.
-Tu a mi no… Aléjate… déjame en paz-
Al fin el llanto se hizo presente (No resistía más); escurría precipitosamente… devastaba con todo; y le desbarataba por dentro.
Descargando el resentimiento encerrado, le dio una bofetada tan fuerte que a él mismo le dolió, hasta el alma…
Cayó sobre sus rodillas; y vio como lentamente Sasuke se apartaba.
Los pasos zumbaban uno a uno en sus oídos, al igual que el cruel mensaje; imborrable…
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De ningún modo pensó llegar a decir eso; ¡cada una de las letras; era una completa mentira! ¡Quería a Naruto más que a su existencia misma!
Seguro, le heriría profundamente. Y justamente; de igual forma se sentía desgarrado en el pecho.
Pero había prioridades;
Y no deseaba que el rubio saliera prejuiciado con ellas.
La separación que se aproximaba le haría daño…
Tanto dolor; por un simple capricho, un error. Un mal cálculo, que se pudo haber evitado, y nadie habría salido lastimado.
FIN