Era una linda mañana, en las instalaciones de la escuela Rikkaidai de Japón. Todos estaban reunidos como siempre, hablando de chismes, o quien sabe que. Un pequeño chico de ojos verdes llegaba bostezando, había que aceptar que levantarse temprano no era definitivamente su fuerte, oh que va, debes hacer lo que siempre debes hacer. -vaya,vaya,vaya… el demonio del Rikkaidai no se ve muy bien hoy – le dijo cierto chico con el cabello plateado colgándose de su hombro. Ese era uno de sus mejores amigos, sinceramente era insoportable, pero que importaba. – ya, venga tío déjalo en paz- dijo otro chico con el cabello rosa, bueno, en ese instituto todo era posible. - ¡déjenme ya par de idiotas! – grito el chico alejándose de ambos enojado, y curiosamente algo sonrojado. – ah? Molestamos al bebe Bunta – dijo el platinado al peli rosa. El chico suspiro, - mejor vámonos llegaremos tarde- dijo empezando a caminar, sus amigos asintieron silenciosamente.
-¡buenos días!- dijeron todos al unísono al ver al profesor entrar. – Buenos días chicos, hoy tendremos una actividad muy interesante- dijo sentándose en la silla, se veía cansado, bueno no sería el único cansado allí. Tendrá que ver, con enseñarle a kirihara a usar pañales ¿cierto? – dijo el platinado a el peli verde en susurro. ¡CALLATE! –grito el chico. – Señor kirihara –empezó el profesor acercándose con el ceño fruncido. ¡Espere!, yo no hecho nada-dijo asustado. El hombre se acerco y le tomo la mano – yo te quiero y te respeto porque eres un hijo de kami- sama (Dios), eres listo, y eres un gran deportista – dijo sonriéndole. ¿Ah? – todos estaban confundidos. La actividad de hoy consiste en escoger a uno de sus mejores amigos y decirles tres razones por las que los quieren y los respetan –dijo el hombre parándose frente a toda la clase. – vamos kirihara, empieza –le dijo el maestro. ¡S-si ¡ -dijo el chico en estado de shock.
Miro a todos lados… miro a bunta y le sonrio. – kirihara debes pararte – le dijo el profesor seriamente. El chico sus piro y fue hacia su amigo algo sonrojado. Se le quedo en frente nervioso. Bunta yo… - eh, kirihara debes tomar la mano del señor Marui –dijo el profesor sonriendo socarronamente ¿disfrutaba ver sufrir a sus alumnos? El oji verde lo hizo , tomo la mano de su amigo. B-bunta y-yo t-te quiero y-y te res-respeto porque … eres mi mejor amigo…. Eres paciente y… eres… - se quedo pensativo…. Su sonrojo crecia a gran escala - … eres lo mejor que me ha pasado. Todos se quedaron sin habla, el chico-demonio tenia un corazón después de todo. Bunta se sonrojo, se paro y camino hacia el platinado. Su cara adquiria el mismo color de su cabello. E-esto… Nyoh yo… te quiero y te respeto… p-porque, siempre me consuelas… me quieres por como soy y porque… t-te… - dígalo de una vez – dijo el profesor irritado- ¡porque te amo! – dijo el chico mas que rojo. A todos se les revolvió el estomago ante esa confesión. Nyoh solo sonrio de forma arrogante, se levanto, tomo la mano de Bunta y Kirihara. Y con esa misma sonrisa dijo: Haber par de inmaduros yo los quiero y los respeto porque soy ardientes, me entienden y los quiero – todos se quedaron boquiabiertos. Si esas eran las confesiones de ese trio… ¿Qué secretos guardaría el club de tennis?