un hombre caminaba de un lado de la oficina, tirando los papeles que estaban por hay, tratando de encontrar la solución al problema que amenazaba el futuro de su hijo sai.
-sakura, comunícame con... "ya sabes quien"- hablo por el teléfono a su secretara.
-enseguida señor lee- respondió de inmediato mientras el hombre se sentaba en el escritorio con la mirada clavada en la puerta. de repente una mujer pelirosa entro a la oficina y le entrego un papel, sin decir nada se fue.
"el martes a las 13" decia el papel, que de inmediato fue arrugada y tirada a la basura
-lo siento sai, pero no puedo permitir que arruines tu futuro- susurro el hombre de negocios mientras miraba el azul del cielo por una de las ventanas de la oficina.
mientras tanto en un lujoso hotel, un rubio abría los ojos lentamente y sonreía al encontrar la tranquila mirada de su acompañante. acaricio el cabello negro y acerco sus labios para despertarlo de un dulce beso...
-podría pasar así el resto de mi vida- dijo el azabache con los ojos aun serrados y acercándose mas al rubio.
-sai...Te amo- susurro el ojiazul, con esa mirada tan tierna que lo hacia parecer un ángel. sai le tomo el rostro y lo beso con pasión.
-naruto, no veo un futuro si no estas en el... lo que diga mi padre no me interesa, yo se que mi felicidad esta a tu lado- el azabache recordando lo mal que se había portado su padre el día anterior.
...................flash back..........
-papa, el es naruto... mi novio-susurro sai mientras tomaba la mano de naruto y miraba la expresión de su padre.
-mucho gusto señor- naruto estaba nervioso tanto que miraba hacia todos lados menos hacia la cara del padre de sai.
lee miro sorprendido a su hijo, quien nunca le había hablado de sus gustos y menos de su "orientación sexual"
-pero que tonterías estas diciendo-miro a naruto de arriba a abajo y después volvio sus ojos a su hijo- ES UN CHICO!!
-lo se papa. pero me he enamorado perdidamente de el- apretó la mano del rubio.
-no digas tonterías, este mocoso no vale la pena hijo, además ya he planeado un compromiso con la hija de el dueño de las empresas Yamanaka.
-como dijiste tu lo as planeado, no pienso casarme con alguien que no conozco- sai se estaba enojando, sentía como naruto se ponía tenso.
-solo estoy pensando en tu futuro!! No es bien bsto que mi único hijo salga con una basura como esta.
naruto quedo en shock, jamas en la vida lo había llamado vasura en la cara, soltó la mano de sai, le sonrió y miro al hombre frente a el.
-con permiso-salio de la oficina, colorado como un tomate.
-espera naruto-le gritó sai, saliendo de la oficina sin ni siquiera mirar a su padre-por favor no le hagas caso, te juro que sin ti mi vida seria una porquería- sai lo miro con esos ojos negros y profundo, mientras naruto caía en su hechizo.
..........fin flash back...........
hoy era martes, lee había cancelado todas las reuniones del día, esperando su cita de hoy.
-señor lee, ya llego sasuke- hablo de repente la secretaria, entreabriendo la puerta.
-dile que pase- hablo con troncalidad lee.
no era la primera vez que solicitaban los servicios de sasuke, pero cada vez que lo veía entrar a la oficina, le daba escalofríos.
sasuke se sentó en la silla frente a lee sin preocupación. apello los codos en el escritorio y miro con intensidad al hombre
-a quien hay que desaparecer?-pregunto con total normalidad. lee se estremeció, le sorprendía lo sínico que era el ojinegro.
no respondió, solo le paso una foto de la cámara de seguridad del edificio, en la que aparecía naruto con una gran sonrisa.
-a este niño?- sasuke se sorprendió, siempre que lee solicitaba sus servicios le mostraba las fotos de algún bejete importante, pero que le mostrara la foto de ese ángel lo sorprendió- y que pudo haber echo este chico?- susurro con curiosidad
-meterse con mi hijo, solo quiero que desaparezca asta que arregle el matrimonio con ino yamanaka.
-hump. secuestra, no es lo mismo que matar... le costara mas caro-sasuke se guardo la foto del chico
-esta bien esta cifra?- lee le paso una de papel que tenia barios ceros.
-perfecto- susurro el azabache levantandose de la silla.-un placer hacer negocios con usted.
-quiero que el trabajo se haga lo mas pronto posible.
-no se preocupe- extendió la mano y ambos se dieron un corto apretón antes de que el azabache desapareciera por la puerta.
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una semana después
naruto caminaba alegremente por la calle, llevaba un regalo para sai ya que era su cumpleaños. planeaba hacer una gran sena con velas y todo... y si sai quería... también habrá otras cosillas...
iba casi saltando por la calle con su cara de duende. solo le faltaban dos cuadras para llegar a su apartamento.
-disculpa. tienes hora?- pregunto un hombre acercándose a naruto.
naruto se giro y lo miro, era muy guapo y tenia cierto parecido a sai, le sonrió y se arremango la manga del suéter naranja para poner al descubierto su reloj.
-son las 11
pero antes de que se diera cuanta, el hombre lo tomo del cuello y lo acorralo contra la pared de una edificio, en la calle no se veía ni un alma, por lo que el rubio se asusto aun mas.
le tapo la boca con un pañuelo que tenia un olor extraño, veía nublado y de repente lo ultimo que santo fue el movimiento de un auto.