Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un malentendido se olvida con un beso por HanSeungKyung

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

un fic más de los twins c:

Notas del capitulo:

Este fic lo escribí en un rato de inspiración y nostalgía xD

Ojala les guste y dejen review

 

¡A LEER!


-Lo odio, lo odio. Lo odio con todo mí ser, con toda mi alma, con todo mi corazón…
Aquellas horribles palabras salían de su boca casi en un hilo de voz. Las lágrimas no dejaban de caer por sus mejillas –las cuales brillaban por lo mojadas que estaban-, sus ojos ya estaban hinchados de tanto llorar, se veían más pequeños, estaban rojos y debido al llanto su voz cada vez salía menos como él quería.
-Si lo odias, díselo…
-No puedo decírselo, no puedo.
-¿Por qué no?
-Porque lo amo. Lo amo con todo mi corazón, con toda mi alama, con todo mí ser, con todo lo que soy y seré.
-¿Sabes que es la quinta vez que repetimos los mismos diálogos?
-Puedes dejarme llorando solo si quieres…
-No te dejare, estas tan loco que podrías cortarte las venas.
-Tengo tendencia a deprimirme no a suicidarme.
-Es casi igual…
Aquello volvía a repetirse por sexta vez en el día. Hacia horas que Kwangmin no paraba de llorar y maldecir los cuatro vientos, de una y otra vez repetir que le odiaba; pero aquello siempre se le olvidaba y terminaba diciendo cuanto le amaba y que no podía estar sin él.
-¿Sabes? Ni siquiera me has dicho porque tienes ese coraje.
-¡No tengo ningún coraje!
-Oh claro, rompiste el espejo solo porque estas feliz. –Miró el espejo destrozado frente a ambos.
-El muy idiota… es un idiota… ¡ES UN IDIOTA!
Nuevamente un ataque de tristeza le envolvió y se fue internando en un mar de lágrimas amargas y saladas que se volvían más y más seguidas. Lejos de quedarse sin lágrimas pareciera que se conectó a una regadera.
-Ya, ya, cálmate por favor. –Le dio palmaditas en la espalda.
-Es que él… él tiene novia… sale con una chica muy linda…
-¡¡NO PUEDE SER!!
-Es verdad… -asintió levantando el rostro –Yo ví cuando se sonreían y después besaban.
-Maldito Youngmin hijo de… -Calló en seco al recibir una mirada fulminante del mayor –Bueno, me callo.
-Ha jugado con mis sentimientos todo este tiempo y yo se lo permití.
-No es tú culpa Kwang.
-Lo es Minwoo… lo es. –Sollozó un poco –Deje que me besara, que me acariciara, que sus manos tocaran los lugares más íntimos de mí, que su cuerpo poseyera el mío… me entregué a él sin siquiera pensarlo dos veces… -su voz se quebraba a cada palabra.
-Eso es porque lo amas, porque tú de verdad lo amas y querías darle todo de ti, darlo todo por él, por su relación.
-Pero a él no le importó eso… él solo me uso y jugo conmigo para después botarme.
-Kwang…
-¡KWANGMIN! –Ambos chicos saltaron de su lugar al ver al mayor de los tres entrar de golpe por aquella puerta.
-¿Qué diablos…? –El maknae no sabía ni qué decir.
- Necesitamos hablar.
-¿Qué jodidos puedo yo querer hablar contigo? –Volteó la cara en señal de indiferencia.
-Me importa poco si quieres o no, vas a hablar conmigo. –Miró al menor de todos –Sal del cuarto.
-No me iré, yo estoy aquí apoyando a Kwang.
-Sal de aquí Minwoo.
-Oblígame. –Le miro retándole.
-O te vas o juro por mi santísima vida que Donghyun se enterara de que lo amas.
-No te atreverías…
-Largo. –Hizo un además con el brazo mostrándole la salida.
-¡Joder! –El castaño se levantó mascullando entre dientes maldiciones hacia el mayor.
El rubio cerró la puerta poniendo el seguro a esta, al ver aquello el menor se levantó del suelo, pues desde que llego y rompió el espejo se había quedado ahí. Con temor divagaba con los ojos por toda la habitación buscando una salida, pero a menos que saltara desde el octavo piso sin morir no había salida alguna.
-¿Qué quieres? –Preguntó secamente.
-Hablar contigo.
-Pues yo no quiero hablar contigo. –Escupió con enfado.
-Mir Kwangmin, vengo completamente fastidiado y no traigo ni humor ni paciencia para discutir contigo así que solamente cállate, siéntate y escúchame.
-¡Oh vaya! Las cosas se hacen cuando tú quieres, yo ahora ya no puedo ni opinar. –frunció el entrecejo.
-Mierda…Kwangmin por favor. Si me dejaras explicarte ya no estarías enojado. –En verdad le estaba costando mantenerse calmado.
-Anda, habla. Te escucho. –Tomó asiento en la cama.
-No bese a esa chica, ella me beso.
-¡Uy sí! Y Minwoo beso anoche a Donghyun hyung.
-Te dije que te callaras, estoy hablando. –Le miró serio –Yo te amo a ti y creo que lo he demostrado un montón de veces. Sin embargo, el celoso siempre fui yo y ahora resultas ser tú.
-Tú te encelabas por ver a Jeongmin hyung abrazarme, yo no me encelé, yo estoy enojado. Tengo motivos para estar así, y es que tú te andas besuqueando con cuanta tipa se te…
-¡Déjame terminar con una fregada! –Alzó la voz interrumpiendo el sermón de su hermano, provocando que éste se intimidara un poco.
-Perdón… -agacho la cabeza.
-Esa chica me pidió un autógrafo y yo amablemente se lo di. Se puso a charlar conmigo y me conto algunas cosas por lo que comenzamos a reír. Sin siquiera preverlo ella se lanzó a mi rostro y me beso, me robo un beso.
Kwangmin se quedó en silencio, no quería decir nada más ¿Qué tal que su hermano volvía a molestarse y le gritaba pero de fuerte o quizá hasta lo golpeaba? Cundo el mayor estaba estresado era de ‘Aléjate que si no te jodes’.
-¿Y ahora te callas? ¡Joder! Ahora es cuando quiero escucharte y tú te quedas callado como si hubieras tragado pegamento industrial.
-No quiero que hyung vuelva a gritarme… -hablo lento y calmado –Además no tengo nada que decir.
-¿No te importa que te esté diciendo la verdad?
-Yo no sé si es verdad o es mentira… -levantó el rostro para verle a los ojos –Lo único que sé es que me siento humillado y utilizado por ti.
-No tienes por qué sentirte así, yo jamás me he aprovechado de ti. –Le miró algo confundido.
-Es que… te vi besándola y… sentí que todo lo que me habías dicho y prometido eran mentiras. –Sus ojos volvieron a humedece –Pensé que tan solo te habías divertido con mi cuerpo…
Youngmin vio rodar aquel par de cristales por las mejillas del menor y sorprendido y con algo de culpa en el corazón se acercó para besar ese para de gotas de agua salada. El castaño sintió las mejillas arder ante el cálido contacto de los voluptuosos labios de su hermano. El tibio aliento del mayor chocaba contra su mejilla y pronto contra sus labios. Un juguetón roce hizo que temblara aferrando un poco las manos a las sabanas.
-Yo te amo… más que a nada, más a nadie, más que a mí mismo. Jamás jugaría con tu cuerpo, mucho menos con tus sentimientos… porque son lo que me mantiene vivo cada día, son lo que me hace ser mejor. Para ser mejor para ti, por nuestra relación, por nuestro secreto amor. –En un suave susurro acompaño las palabras con otro tímido roce de labios –Te amo Kwangmin.
-Yo también te amo… -sollozó suavemente –Te amo como no tienes idea. –Se aferró al mayor en un abrazo –Te amo con todo mi ser, tienes mi corazón, mi alma… todo yo te pertenezco y no quiero ser d nadie más que de ti. Te amo Youngmin y por ti seré mejor luchare más porque seamos felices…
Una sonrisa adornó el rostro del rubio quien levanto la cabeza y beso la cabellera de su hermano. Le elevo el rostro uniendo sus frentes para verle a los ojos mientras su mano derecha acariciaba con la mayor ternura del mundo la mejilla del pequeño.
Las mejillas del castaño se colorearon de un hermoso rojo, que solo incito más al rubio para acercarse a estas y besarlas con dulzura para después de aquello dar un casto beso a los rosados labios del menor. El beso fue fugaz y después de unos segundos otro fue dado y enseguida correspondido por el más bajo, que movió suavemente sus labios sobre los contrarios creando así un tranquilo vaivén de bocas.

Aquel malentendido había sido solo eso, un malentendido. Kwangmin se golpeó mentalmente al haber hecho semejante berrinche, semejante escena por algo que ni siquiera se dispuso a aclarar con el mayor. Pero ahora sabía que pese a todo el mayor le amaba, Youngmin le amaba como él le amaba y sin importar qué el mayor siempre le hacía feliz, sabia como calmarle y hacer que olvidara todo con un simple beso.
Aunque de un beso podrían siempre pasar a algo más. Y quién sabe, quizá se enojaría más seguido, el rubio tendía a consentirlo de más cuando le hacía enojar. Bien se dice que hablando se arreglan los malentendidos, pero sin duda, un malentendido se olvida con un beso.  
Notas finales:

¿Les gusto? Espero que si... >w< Realmente me esforce y quería compartirlo con uds.

 

Nos vemos en el sig. fic, dejen review owó

bye bye


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).