Diferente
Alemania lo nota. Hay algo diferente en él, su hermano.
Gilbert parece ser el mismo de siempre, pero no, hay un algo.
No sabe lo qué es.
Últimamente insiste mucho en acompañarlo a las reuniones. Es extraño, Gilbert solía encontrar aburridas las cumbres mundiales y las demás naciones encontraban sumamente molesta su presencia.
"– Prusia no es una nación, no es necesaria tu presencia –" alegaban; el aludido fingía no prestar atención, hacía como que no le importaba; pero le hería y Lud es consciente de ello.
Es desconcertante.
Prusia se empeña en acompañarlo y él no puede evitar acceder.
Sigue siendo molesto para todos, pero – últimamente – parece más tranquilo; concentrado.
Ludwig sigue la trayectoria de su mirada buscando entender. Su mirada se topa con Alfred o su silla vacía. ¿Qué hay de interesante en ello?
No entiende.
Su hermano parece esforzarse mucho en eso lo-qué-sea-que-hace; entrecierra los ojos y se tensa, permaneciendo así un rato para luego relajarse; una sonrisa se instala en su rostro y gesticula palabras sin emitir sonido alguno.
Gilbert hace aquello en cada reunión; más de una vez si es que se distrae.
Sonríe mucho, de una manera que (el menor) no recuerda haber visto antes.
En los recesos desaparece.
No logra encontrarlo; no está con Francia o España como sería lógico pensar.
Hay algo distinto; no sabe qué es. Mas no se limita sólo a las reuniones.
Pasa mucho tiempo pegado al móvil o frente al ordenador; y eso sería normal si no fuera por es inusual sonrisa en su rostro. Misma que ya no es tan inusual, puesto que la ve muy seguido.
Recientemente le ha pedido que prepare panqueques; sin embargo no parece conforme con el resultado.
Hay, incluso, un frasco grande en la mesa.
No recuerda haberlo traído él; está seguro de no haber comprado algo así.
Tiene la certeza de que es su hermano quien coloca aquel recipiente sobre la mesa. Alemania se encarga de guardarlo en la alacena, mas éste siempre termina sobre la mesa donde atrae la atención de todo aquel que entra en la cocina.
El albino sonríe radiantemente al ver el frasco o quizá le sonríe a éste.
¿Desde cuándo le gusta el jarabe de arce?
Hay algo peculiar en la actitud de Francis hacia su bruder; a veces luce receloso; otras cómplice – sobretodo cuando Estados Unidos o Inglaterra están cerca –.
Desconoce el porqué del cambio, pero el de ojos carmesí no deja de nombrar a alguien. Jamás usa su nombre para referirse a él, sino un mote cariñoso o un diminutivo.
El alemán jamás logra grabárselo.
Hay algo raro, es evidente mas no notorio.
Ludwig no comprende qué cambio; sin embargo siente que debe alegrarse.
Quiere creer que es algo bueno, porque Prusia parece emocionado y Gilbird rellenito.
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N/A: Adoro la última línea. Disfruté mucho escribiendo esto y soy feliz de tener otro PruCan (porque sólo tengo dos – un drabble que está por ahí perdido y otro escondido en un Americancest ^^U–). Me pareció raro escribirlo todo desde el punto de vista de Lud, pero me gustó. Espero hayan disfrutado de esto, aunque sea un poco.