Revolvía mi café con parsimonia, de lado a lado y viceversa, ya debe estar frío pero no importaba, nada me importaba cuando pensaba en ella.
Di un suspiro, esos que están cargados de sentimientos, de necesidad, de la intensa esperanza de que algo ocurra un día. Volví a revolver mi café, ya no humeaba, ya estaba totalmente frío, alcé mi rostro para mirar a mí alrededor.
Una cafetería llena de personas, ejecutivos, personas conversando, ancianos, parejas.
Mi concentración se detuvo en una joven pareja a mi lado, eran dos chicos, tenían sus manos entrelazadas por encima de la mesa, se daban miradas cómplices, reían en el lenguaje que ellos entendían, ese idioma de enamorados, ese idioma creado por el amor.
Mi mirada volvió a mi café, ¿tan difícil era poder tener una relación?. Les volví a mirar de reojo, uno le acariciaba la mejilla a otro con ternura, di un suave suspiro, arreglando unos cabellos detrás de mi oreja.
Que no daría yo por estar con ella de esa forma, que no daría yo por que ella acariciara mi mejilla con ternura, con esa ternura infinita que pronunciaba cuando decía mi nombre, cuando me felicitaba por que había llegado a una nota, cuando ensayábamos, cuando me abrazaba en mis fracasos, cuando…era ella.
-¡Tiffany! –escuché en alguna parte de la cafetería, era esa voz que tanto me encantaba, esa voz que solo mi corazón podía reconocer con tanto júbilo, entrecerré mis ojos para sonreírle y moví mi mano para que me viera-
-Taeyeon ah ~ -susurré al verla caminar entusiasmada hacía mi, abrazada a su pecho tenía una carpeta de color rojo, su sonrisa era impecable, al parecer le había pasado algo bastante favorable para ella, su felicidad era contagiosa y yo ya me sentía diferente con el solo hecho de verla correr hacia mi-
-Lamento la demora Fany –dijo con suavidad moviendo la silla enfrente de mí para sentarse poniendo la carpeta a un lado de mi café-
-Descuida, llegué hace muy poco –mentí, cuando se trataba de ella llegaba enseguida o a veces horas antes para intentar controlar mis nervios.
Pero este día había sido especial, me pidió con urgencia que nos juntáramos, éramos las mejores amigas, era normal que me contara todo lo que le pasaba, lamentablemente siempre hay una de las amigas que confunde todo con el amor, lamentablemente, esa amiga, era yo.
-Tengo una noticia que darte…-dijo mientras abría la carpeta que tenía en la mesa, me entregó un papel, que curiosamente estaba en ingles, ella sabía a la perfección que yo hablaba ingles, pensé, inocentemente que quería que lo tradujera- me iré de Corea…
Esas fueron las palabras exactas con las cuales mi corazón se hizo trizas, las palabras que hicieron que mi vida se resumiera a nada, el momento en el cual mi mente estalló en mil pedazos y mi sonrisa seguía intacta a los ojos de mi mejor amiga.
-¿Te irás de Corea? –dije ilusa, intentando que me dijera, que se había equivocado, que era una broma. Ella solo asintió efusivamente con la cabeza mientras me mostraba otros papeles, que confirmaban aquello-
-Por fin ha salido la beca de especialización, me he ganado la estadía en Estados Unidos para estudiar canto, y si todo resulta bien establecerme ahí bajo un sello discográfico –dijo entusiasmada juntando ambas manos frente a sus labios sonriente-
Ah…Taeyeon deja de pisotearme.
-Amiga, no puedo estar más feliz por ti…tu sueño, se hace realidad por fin –le dije apretando mis manos en los papeles que sostenía entre estas, en mi interior lloraba, mi piel era cortada y sangraba, por Dios que sangraba, me sentía como una muñeca de trapo, que cuando la niña crece es tirada al olvido sin importar todos los lindos momentos que pasaron juntas, sin importar que la muñeca tiene corazón, sin importar si la muñeca siente lo que a su niña le ocurre-
-Así es, mi sueño se cumple Fany, no sabes lo feliz que estoy…-sonríe tomando mi mano, una electricidad recorre mi espina dorsal al sentir su contacto, no me sueltes- Prometo escribirte cada vez que pueda, ¿Si? –Susurra tiernamente cerrando sus ojos mientras sus dorados cabellos caen por un lado de su hombro-
-De acuerdo, estaré esperando con ansias tus noticias, día a día –dije, apretando sus manos entre las mías, la miré a los ojos y sentí ese molesto y notorio, nudo en la garganta cuando se quiere estallar en llanto, tragué saliva una y otra vez, tosí suavemente para intentar calmarme y luego le volví a sonreír-
-Taeyeon ah…hay algo que debo decirte…-susurré ensombreciendo mi mirada bajo el flequillo de mi cabello, era el momento, no había otro.
-¿Sí? –me dijo curiosa con su sonrisa ladeada mientras me miraba con esos ojos, que irradiaban pureza.
-Yo…-fui interrumpida por el sonido de su móvil, que estruendosamente sonaba en el pequeño bolso que colgaba en su hombro, hizo un ademán con su mano indicándome que contestaría, nuestras manos se desunieron, no por favor, no me sueltes…
Ella reía a la persona que tenía toda su atención en el móvil, movía su cabello coquetamente ante cada risa y cada palabra que pronunciaba, pasado unos minutos colgó y tomó la carpeta rápidamente-
-Lo siento, era de la Universidad, debo ir a arreglar las cosas para irme –dijo apresuradamente levantándose y arreglando las cosas, mis labios se entreabrieron intentaron decir alguna palabra coherente para el momento, pero solo mis ojos se perdían en su silueta y en sus labios que me hablaban dando infinitas disculpas hasta que…
-Lo que me tenías que decir, me los dices vía e-mail…debo irme –sonríe saliendo del café - ¡te quiero! ~ -vociferó antes de cruzar el umbral de la cafetería despidiéndose con la mano salió corriendo calle abajo.
Miré nuevamente el café frente a mis ojos, intacto tal cual como lo había pedido hace un rato, ojalá mi corazón estuviera igual de intacto.
Tenía que reconocer, mi corazón estaba dañado, bastante sangrante y por sobretodo pisoteado.
Ahí me quedé entre lágrimas y sollozos, no podía hacer nada, me sentía inútil, idiota, ilusa ante la ilusión de un amor que pensaba posible, no encontraba respuestas a lo que acababa de pasar.
Pagué el café, que no bebí, me levanté y salí de la cafetería mirando por donde había corrido mi amiga, me dispuse a caminar en dirección contraría, alcé mi rostro al cielo, sabiendo que no la volvería a ver jamás, que solo sería una de esas amigas a distancia, esas amigas que se escribirán de ves en cuando en redes sociales, esas amigas que verán una foto y se acordaran de algunos momentos juntas…mientras yo, estaré aquí, amándola como jamás nadie lo ha hecho, guardando abrazos, caricias y besos que quise entregar, estaré aquí velando por su felicidad rezando día a día por que sus sueños se cumplan, aquí estaré con mi amor no correspondido, que nunca tuvo receptor por que nunca fue emitido.
Comencé a caminar calle arriba, escuchando el sonido de mis tacones retumbar en mis oídos, el cielo lentamente se volvía gris y unas pequeñas gotas comenzaron a caer sobre Seúl, lloraban al igual que yo, una esencia pura se iba de sus aposentos, adiós mi Taeyeon…
-Beautiful Goodbye ~ -susurré perdiéndome entre lagrimas y gotas de lluvia.