Me limpié la nariz por enésima vez, seguro ya ha de estar roja y a juzgar por el ardor, diría que se empezó a descarapelarse.
-Ahhh~- me quejé, no es divertido estar enfermo de gripa. Tomé otro paquete pañuelos de algodón, porque en efecto, Taemin me compro de algodón extra suave, eso dice la caja.
Caminé hacia mi cuarto, ahí me acosté en la cama para poder descansar un poco, el médico dijo que mucho reposo y me curaría más rápido. Cerré los ojos pero de inmediato me senté porque sentí que iba a estornudar, pero se fueron las ganas. Solo me quedaron los ojos llorosos.
-Tonta gripa.- susurré mientras me limpiaba los ojos y de paso de nuevo la nariz.
-¡Hyung! ¡Ya llegué!- sonreí al escuchar su voz. –Hyung, ¿cómo se siente?- entró al departamento y con esto a mi cuarto. –¿Aun está muy enfermo?- me preguntó con un tono de preocupación acompañado de ojos curiosos.
-Ya me siento mucho mejor, no te preocupes, mi cuerpo resiste este tipo de enfermedades. Usualmente es un día de incubación, uno de estornudos, dos de moqueo y temperatura y el quinto día ya estoy curado. Me faltan dos días.- le sonreí y él solo asintió, tratando de creerme.
-Debe de cuidarse más, no salga a la lluvia sin paraguas.- ¿me regaño? Pero bueno sí en parte fue eso, hace poco llovió y tenía que entregar una carpeta con mi trabajo de la facultad, así que salí corriendo a las oficinas, lo bueno es que no me mojé mucho de ida, pero de regreso hasta me tropecé y caí en un charco, el médico dijo que si me hubiera bañado cuando regrese a casa, no me hubiera enfermado. –Además, tiene que fijarse bien por dónde camina.- se levantó de la cama y puso el dorso de su mano en mi frente. –Ya no tiene temperatura, me alegro.- sonrió ante ese hecho.
-Eso es porque estuve tomando medicamentos, ya casi se terminan pero seguro mañana me sentiré mejor.- le sonreí y retiré su mano de mi frente.
-Tiene el cabello húmedo, ¿se bañó? Espero que haya encendido su boiler, sino empeorara.- se levantó de la cama. Pues, no, no encendí el boiler porque los fósforos se me apagaban antes de que la flama tomara vida dentro del boiler, me frustré y decidí que no era necesario. Pero me siento igual, no creo que haya empeorado.
-¿Cómo te fue hoy, Taemin?- le pregunté mientras me sentaba en la cama y lo seguía con la mirada, puesto que fue a dejar su mochila sobre una de las sillas dentro de la habitación.
Él y yo compartimos departamento porque así es más fácil pagarlo… además de que como pareja y así se siente mejor a que fuera otra persona. Es como un entrenamiento para ¿cuándo nos casemos? Jajaja, no sé si eso se aplica entre parejas del mismo sexo.
-Bien hyung, entregué mi tarea en la que me ayudó, participé en clases y desayuné con Key y Jonghyun. Minho también está enfermo.- supongo que es normal, por el cambio de clima o la lluvia sorpresa de hace poco. –Y mientras buscaba un libro en la biblioteca encontré uno de remedios caseros.- sentí que el tiempo se detenía, no, remedios caseros no. –Leí que el Té de Cebolla es bueno para la gripe y los pulmones.-
-Pero son remedios caseros, no garantizan su efectividad como los medicamentos de farmacia.- dije serio, espero que no haya tomado copia de algo que “ayudara” en mi enfermedad.
-Pero sí funcionan, las abuelas usaban eso y por algo llegaron a esa edad, saqué la fotocopia de la receta de ese té, lo voy a preparar.- dijo sonriendo, solo asentí porque no quiero desanimarlo.
-Pero no tengo cebollas.- dije intentando que esfumara esa idea.
-Compré antes de venir aquí.- contestó, me levanté de la cama y fui la cocina, ahí estaba él pelando las cebollas y metiéndolas en una tetera. –Mi abuela decía que todo se puede hacer té, solo mételo en un litro de agua y ponlo a hervir, así que eso haré.- vi que vació agua a la tetera y la puso en la estufa. –Es como jugo de cebolla.- terminó de decir pero eso me dio un poco de asco.
-Repítelo y te darás cuenta de lo grave que es lo que intentas hacer.- dije mientras caminaba a la estufa, intenté apagar la parrilla pero me dio un manotazo.
-No hyung, yo le voy a hacer un té y se lo tomara sonriendo, mañana no tendrá gripa y se dará cuenta de que los remedios caseros son efectivos.- dijo tan serio que creí que había madurado en ese intervalo de tiempo en el que habló, pero su mirada se suavizó. –Además, estará hecho con amor.- al igual que su tono de voz.
-Está bien.- me rendí. Lo quiero sí, ¿pero té de cebolla? Tal vez es como dice Minho, el amor llega hasta donde el estomago aguanta. Sacudí mi cabeza para borrar ese comentario. Tal vez no suena ni sabrá bien, pero entenderé, Taemin se tomó el tiempo de buscar un remedio y encima, me lo está preparando.
Aun así, hay algo que no me gusta.
Regresé a la habitación y me senté en la cama, tomé mi celular y miré la hora. 3:34pm, seguro también querrá hacer la comida. Pasó unos minutos y entró Taemin a la habitación con una taza humeante de té. Temblé.
-Ya está hyung, tómelo.- me dio la taza y solo asentí. Le soplé para que el vapor se disipara. Miré mi reflejo en el líquido y vi mi cara de pánico. Por Taemin. Cerré los ojos, no respiré y pensé en pollo.
Después de 8 agonizantes tragos, se acabó el bendito té, no suspiré aliviado porque él se ofendería, solo respiré hondo y le di la taza.
-Gracias Taemin.- lo miré a los ojos y le sonreí. –Ha estado mejor de lo que esperaba.- sí sabía malo pero no tanto como lo pensé.
-De nada.- dejó la taza en la mesita de noche y se sentó en la cama a mi lado, abrió las cobijas y se acostó a mi lado. Yo me dejé caer para poder abrazarlo. –Hyung… ¿cuándo te curaras? Extraño sus besos.- vi que se sonrojó, así que solo sonreí.
-Mañana, gracias a tu té de cebollas lo haré mañana.- despeiné un poco su cabecita.
-Pero yo quiero un beso ahora.- susurró. –Hace más de tres días que no nos besamos, hyung, no aguanto más.- me miró a los ojos y se empezó a acercar, vi que alzó sus labios pero lo detuve.
-No te quiero contagiar, mejor espera un día más.- dije serio. Él solo hizo un pucherito.
-Pero ya toqué sus manos, también tienen gérmenes.-
-En eso te equivocas, me desinfecto las manos y brazos cada que toso o estornudo, eso está limpio porque sé que no estaría tanto tiempo sin tomar tu mano. Pero no puedo usar el anti bacterial en la boca.- abrí mis ojos de sobremanera, me interrumpió a medio discurso para robarme un beso.
-Qué le costaba eso, ¿hyung? Y le aseguro que no me voy a enfermar, sino, sé que usted me hará un té de cebolla.- me sonrió y después se acurrucó en mi pecho. –Descanse un poco, así se recuperara más rápido.- susurró, parece que la escuela le es pesada porque se está durmiendo.
-Así lo haré, también descansa, Taebaby.- besé su cabello y cerré los ojos.
…
-¿Le pusiste dos o una cebolla?- le pregunté a Taemin, milagrosamente su té hizo que la gripe se fuera al día siguiente, lo malo es que ahora él se contagio, pero no fue por mí, sino por los estornudos estruendosos y mojados de Minho.
Mi pobre Taemin está envuelto en cobijas en el sofá, con la ranita de vapor y un termómetro en la boca, además de que su nariz está totalmente roja y reseca de lo mucho que se ha limpiado la nariz. Y yo que quería evitar esto limpiando y desinfectando todo para que Minho estornude y lo contagie.
-Una, solo es una cebolla.- me contestó con su voz alterada por la mucosa nasal. Pero le pondré dos, así se recupera más rápido. Vacié las cebollas limpia y peladas en la tetera y la puse a hervir. Solo espero que le agrade el sabor, porque a mí, de no ser porque lo preparo él, lo hubiera escupido.
Las cebollas no van en té.