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Fué Un Error por KevinSheik

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Notas del fanfic:

Como sabran los personajes no me pertenecen, le pertenecen a Square Enix y Disney Interactive Studios.

Notas del capitulo:

Hola...


Aquí va mi primer One Shot, así que tenedme piedad por el supremo Kayosama


Porque decidi hacer un fic de esta pareja, bueno en primer lugar porque mola esta pareja, leí un par de fics de cierta autora cuyo nombre no mencionare para no hacer publicidad gratis, sale esta perejita causante de alguna que otra hemorragia nasal y aunque sea secundaria es muy interesante, por ende este fic es de esa pareja...


Yo Disparo de una vez y me piro.

Fue Un Error


Capítulo I – Partida y Regreso


Roxas y Sora, caminaban uno al lado del otro, platicando sobre varios temas de la vida después de haber salido de la Universidad, Sora caminaba a pie sobre la acera y Roxas se movía con su fiel amiga, una parte de su vida, su amada patineta sobre la calle.


Después de caminar por un largo tiempo, llegan a un edificio de siete plantas en donde se encontraban los apartamentos de Sora y Roxas, por el aspecto ruinoso del edificio en su exterior, se daba cuenta uno al instante de que era un edificio para los estudiantes de clase media. En donde lo único que tenía de atractivo y diferente el lugar era el hecho de que el ruinoso edificio, estaba contiguo a un pequeño bosque de pinabete.


Así fue como los dos primos y amigos del alma, subieron hasta el quinto nivel, siendo este un auténtico calvario, el ascensor se había descompuesto varias semanas atrás, y los encargados del edificio no se tomaron la delicadeza de al menos buscar alguien que lo reparara.


Se despidieron entrando en sendos apartamentos, entrando Roxas en el apartamento 94, cuando entro a su diminuto apartamento y con diminuto me refiero a una sala diminuta, una cocina diminuta, un comedor diminuto, un baño diminuto y una única habitación de tamaño familiar, al contrario de lo que uno esperaría de como fuera el apartamento, de un adolescente de 18 años soltero con una gran adicción a los videojuegos en específico el WoW, y con una mascota que solo él y su dos mejores amigos conocían de su existencia. El apartamento estaba ordenado, no ordenado como si una abuela viviera ahí, sino más bien como una habitación de una puberta de catorce años.


Roxas, saco un poco de helado del refrigerador y encendió el televisor, daba gracias a todas las deidades conocidas de que era viernes, al demonio las tareas, al demonio los profesores y al demonio todo. Ahora solo era el, medio litro de helado y 24 pulgadas de televisión.


Sin darse cuenta, Morfeo lo golpeo de lleno en la cara, había caído rendido (a las seis de la tarde), cuando despertó lo único que vio fue la cara de su gato llamado “Mishy”, después su estómago reclamaba algo más que medio litro de helado, así que aun adormitado se encamino a la diminuta cocina, a recalentar un poco de lasaña que su adorada madre le hizo, y como toda adorada madre el tamaño de la porción era suficiente como para alimentar a un batallón.


Después de comer y levantar sus platos, el sonido del timbre, lo distrae intrigado por quien llamaría a la puerta, les había dejado claro a sus amigos más cercanos que él no estaba disponible en la noche, expresándolo lo mejor que podía a aquellos que eran testarudos, necios y tontos (Sora), que esa noche era para él y Manuela Palma.


De pronto vuelve a sonar insistentemente el timbre, Roxas se encamina hacia la puerta maldiciendo por todo lo alto, viendo antes de abrir por el ojo de la puerta de quien se trataba, al no poder identificar a la persona que se encontraba del otro lado de la puerta, abre la puerta, dejando frente al a un joven alto, blanco de una cabellera gris a la altura de los hombros.


Roxas, se le queda embobado viendo por unos segundos, pero después espabila, y se dirige temerosamente al desconocido.


            -Si... en que le puedo ayudar... eh... Señor... ito…


Roxas no hallaba que decir, se había quedado embobado viendo al extraño.


            -Señor... puf por favor, no me haga sentir viejo... respondió rodando los ojos… solo tengo diecinueve años... y en que me puede ayudar... es todo lo contrario... yo le vengo a ayudar. Me… me llamo Riku.


            -A ayudarme... volvió a preguntar Roxas.


            -Así es... mmm después Riku, saco una hoja doblada perfectamente mal de su bolsillo trasero del pantalón (Riku esta con la ropa de Kingdom Hearts: 3D), usted es el joven Strife... Pregunto esta vez Riku.


            -Eh... si yo soy... porque respondió Roxas.


            -Entonces déjese llevar por el placer... tengo una orden especial de darle placer… por atrás a nuestro cliente, respondió Riku.


La reacción de Roxas, fue abrir los ojos como platos, y retroceder un par de pasos, no estaba seguro si era una broma o si ese sujeto llamado "Riku", decía en serio de darle placer por atrás. Segundos después Riku entra en el diminuto apartamento y agarra a Roxas, y le empieza a besar el cuello.


Roxas, estaba en estado de Shock, y no era porque fuera un hombre el que le estaba besando o mejor dicho, devorando el cuello, además de agarrarle el trasero, ya desde hacía un par de años el decidió en que liga batear, pero era algo que solo sus mejores amigos (Dos), su hermano mayor, su primo, su madre y lamentablemente su única ex novia sabían.


Roxas, trato de alejarse del sujeto… o por lo menos lo intento, las manos de Riku… simplemente tocaban todo… poco a poco Roxas… se fue calentando y dejándose hacer de todo sin protesta, hasta que Riku, levanto a Roxas, del trasero y lo llevo hasta su cama en donde  muy “suavemente” lo dejo caer, Roxas, solo llevo su mano izquierda a donde su cuerpo recibió el golpe de lleno.


Riku que se estaba desvistiendo, hasta quedar al natural, se acercó a Roxas… y con la menor delicadeza le empezó a desvestir, Roxas sentía una descarga eléctrica cada vez que Riku pasaba sus manos por su desnuda piel, centrándose en el pecho, ligeramente marcado, que dé hecho, estaba ligeramente marcado por la delgadez de Roxas y el poco ejercicio que hacía era suficiente para marcarle un leve lavadero. Así como el tatuaje de una X gótica en toda la espalda de Roxas.


Riku empezó a lamer los pezones del rubio que empezaba a gemir, aunque trataba de minimizar sus sonidos, siempre más de alguno se le escapaba, excitando cada vez más y más al albino. Después de un rato, Riku puso en cuatro a un Roxas muy excitado, empezó a darle un lento beso negro…


La lengua de Riku, irrumpía en la casi virgen entrada de Roxas, la única vez que había sido irrumpida con anterioridad, fue cuando una noche en la que Roxas se la jalaba, decidió probar… pero al no poder hacer dos cosas bien al mismo tiempo, decidió solo jalársela.


            -Estás listo… pregunto Riku, alejándose del trasero ya dilatado de Roxas buscando entre su ropa un condón (La Seguridad ante todo).


Roxas solo se removió, volteando a ver a Riku que ya se estaba poniendo el condón, Roxas se sorprendió por el largo de la herramienta del albino, así como el escultural cuerpo del albino, cuando se lo coloco bien, vertió un pequeño chorro de un líquido frio y gelatinoso en la entrada del rubio, quien se estremeció un poco por la sensación tan extraña.


            -Mmm… gimió Roxas, al sentir un dedo surcando su entrada… Roxas se retorció por la sensación.


            -Jajaja… veo que te gusta, oh me equivoco… pregunto Riku con una sonrisa socarrona.


Roxas literalmente estaba mordiendo la almohada. Se retorcía como nunca, jamás había sentido anteriormente tanto placer, y más de una parte que muchas veces es olvidada en su cuerpo. Ahora tenía dos dedos haciendo tijeras en su interior. Sentía que no podía aguantar más tiempo.


Un tercer intruso se alojó en la parte trasera de Roxas, después de un breve masajeo, Riku saco sus dedos, acerco su cetro de dominio a la casi virginal entrada de Roxas, y le empezó a penetrar, aun después de un larga rutina de dilatación, Roxas aún estaba estrecho… y era virgen.


Riku, sonrió, sería el… el que se llevara para siempre la virginidad del Rubio, se comería ese trasero lampiño y blanco ahora algo enrojecido por el duro agarre de sus manos.


            -Ha… duele… sácamelo por favor… ha… Roxas hacia sus gemidos lastimeros que más calentaban al albino, por la dura intromisión, la incomodidad lo mataba… sentía que su culo agarraría fuego de tan caliente que estaba.


Riku, muy lentamente siguió metiendo sus más de veintiún centímetros de filete en tubo por la estrecha cavidad de Roxas, que cada vez se retorcía con más violencia, asomándosele algunas lágrimas a su hermoso y delicado rostro.


            -Veo que te gusta… no es así… pregunto Riku, dándole una dura nalgada a Roxas, que gimió como nunca en su vida…


Roxas se acostumbraba cada más a el dolor, pero persistía la sensación de ser partido en dos, así mismo por instinto unas ganas irrefrenables de ir al baño y hacer del número dos.


            -Tengo ganas de ir al baño… menciono Roxas, cuando Riku, empezó a embestirlo lentamente…


            -Jajaja, cuando acabe contigo… no podrás ir a un baño porque no podrás sentarte en una semana… caminaras muy abierto… si es que podrás caminar…


Roxas estaba muy excitado, llevo su mano izquierda a su entrepierna y se empezó a masajear a la misma velocidad con la que era arrollado por el albino, si antes intentaba controlar los sonidos guturales que salían de su garganta, ahora estos sonidos tenían paso libre al mundo exterior.


Solo la luna era testigo (y los vecinos de al lado), de la salvaje empotrada que le estaba dando Riku a un Roxas, ya pegado a la pared de su habitación, gimiendo descontroladamente, que de un par de estocadas, eyaculo sobre la pared y de paso manchando todo lo que estuviera en un radio menor a 50 centímetros, tenía que admitir que fue la mejor corrida de su vida.


Riku, empezó a morderle el cuello a Roxas, aumento la velocidad de sus embestidas ahora Roxas, golpeaba su frente contra la pared, con cada estocada, cuando después de un breve intervalo, sintió como el preservativo en su interior se extendía. Señal de que su violador se había corrido por todo lo alto en su interior.


Con muy poco cuidado salió del interior del rubio, que emitió un gemido lastimero por el brusco movimiento.


            -Ha… jadeo Riku, por la ronda de “ejercicio”, has… estado excelente… dijo para después quitarse el condón, empezando limpiarse y tragarse su propio extracto, poniéndose a buscar su ropa, que había terminado por todas las partes del apartamento.


Roxas no aguanto mucho tiempo más y se fue directo al baño, mientras eso Riku, se vistió y vio que se la había salido un papel de estos, lo levanto y vio era el que le indicaba la dirección, cuando vio algo que lo alarmo de una manera increíble, viendo detenidamente se dio cuenta que había metido la pata hasta el fondo, la dirección, decía, apartamento 99, edificio E, Universidad de Twilight Town, y después rezaba el nombre Sora Strife…


            -Mierda, grito Riku, a los cuatro vientos, la había cagado hasta el fondo, le dio la follada de su vida a la persona equivocada.


Cuando Roxas, salió del baño le dolía el trasero, miro a Riku, que se le acerco rápidamente y antes de que abriera la boca, el albino pregunto.


            -Tu… tu… eres Sora Strife, este es el apartamento 99 cierto, la voz del albino estaba algo temblorosa y demostraba miedo.


            -Eh… a… no… respondió Roxas, cuando era agitado por Riku, después volvió a responder, yo soy Roxas Strife, Sora… Sora es mi primo y este es el apartamento número 94. Porque… pregunto Roxas, ya con la confusión marcada en su rostro.


            -Q… Que… respondió Riku, creo que me eh equivocado, esto… esto fue un error, sin eso fue, respondió Riku, evitando cruzar la mirada con el rubio.


            -Pedazo de imbécil,  me rompiste el culo porque pensaste que era Sora, ha… grito Roxas… el enojo arribo a la cabeza de Roxas, acto que hizo que golpeara con una certera patada las bolas del albino que cayo, agarrándose sus partes delicadas y refunfuñando algo inentendible para Roxas.


Aun retorciéndose Riku, consiguió hablar, lo más calmado que su adolorido cuerpo podía permitir.


            -Lo… lo siento… pensé que eras Sora…


            -Idiota, respondió Roxas, tu solo preguntaste si yo era el “joven Strife”, respondió haciendo comillas con los dedos en la última parte de su frase.


            -Lo se… lo se… dijo Riku, levantándose, bueno… yo… lo siento… así que me voy… tengo que cumplir con mi trabajo…


            -De que… pregunto Roxas… de prostituto…


Riku volteo rápidamente, si realmente era eso, no le gustaba que lo llamaran así, así que con la dignidad que le quedaba cogió sus pertenencias y se encamino hasta la salida.


            -Bueno… me voy… dijo antes de abrir la puerta, oh… ah… si ten, dijo Riku acercándole una pequeña tarjeta, bueno… Adiós y Hasta otra.


Después el albino desapareció del arco de visión de Roxas, que después cerró la puerta y se sentó pero un increíble dolor lo regreso a la realidad decidió irse a la cama, cuando entro a su cuarto vio el desastre que había hecho, resignado cogió una cobija y fue a dormir al sofá.


Estando ya posicionado en la que sería su cómoda y calientita cama, leyó la pequeña tarjeta que le dio el albino.


Atrapa Sueños


Deje Correr su Imaginación.


Tel: 502 5555 - 5505


En la parte de atrás solo estaba escrito el nombre “Riku”, con una letra casi indescifrable. Sin más después de escasos cinco minutos, el cuerpo de Roxas, después de tanto ejercicio, el cuerpo del rubio fue cubierto por largos y suaves brazos de Morfeo.


Al Día Siguiente


Amanecía en Twilight Town, un grisáceo día coronaba la ciudad, que poco a poco se iban tornando a su alrededor las típicas nubes de lluvia. Así como un aire del demonio que hacía que la temperatura se sintiera hasta los huesos. En la habitación de cierto Rubio, el clima era igual o peor que al aire libre, ese viejo y feo edificio realmente no era muy aislante que digamos. Esto no hacía nada más que alterar el ciclo de diez horas de sueño de Roxas.


Cuando abrió los ojos Roxas, lo primero que su retina pudo captar al cien por ciento fueron unos enormes ojos azules, idénticos a los suyos, sin duda alguna el dueño de estos orbes, no conocía algo llamado “espacio personal”.


            -Ah… grito Roxas, por la invasión de su espacio.


Lo siguiente que se escucho fue una sonora carcajada, después de que Roxas espabilo, se sentó o mejor dicho intento sentarse, un dolor agudo en su ano irradiado a toda su parte baja lo regreso a su posición inicial, Roxas solo pudo dar un gemido lastimoso y disimular un poco. Antes de esperar una respuesta ante tan ridículo comportamiento.


            -Ven que haces aquí…


            -Vaya Roxy… que no te dije que este fin de semana era de hermanos… pues así que aquí estoy… hoy no te me escaparas te quiero sacar unas respuestas que son de suma importancia para mi…


            -Ha que… que quieres saber…


Ventus sonrió y se levantó al parecer la hospitalidad del dueño del hogar no era suficiente como para hacerle el desayuno a su visita.


            -Bien comenzare con una pregunta, que espero me aclares en todos los aspectos.


            -Adelante dispara, respondió Roxas.


Ventus sonrió para sí mismo cogió su plato de cereal y el de Roxas, caminado hasta quedarse plantado enfrente a Roxas y después con una maquiavélica sonrisa se puso enfrente de Roxas y pregunto.


            -Quiero que me cuentes con lujo de detalle, que demonios pasó ayer en tu habitación. Eh visto en el cesto de basura en preservativo usado y… Ventus se llevó una cucharada de comida a la boca, mastico y después continúo… así como quiero que me digas quien fue el vampiro que te mordió el cuello, eh hizo el desastre de tu cama.


La cara de Roxas, estaba igual que la luz roja de un semáforo, rápidamente volteo, acto que solo hizo aumentar la sonrisa de Ventus.


            -Eh… a… mmm… ayer… coff, coff, no… no pasó nada que interese…


Respondió Roxas, tratando y rogando que se minimizara el interés de Ven, por el asunto, cosa que no consiguió…


            -Oh… Roxy… saber quien se ha tirado a mi hermanito y de paso quitarle su virginidad si es asunto mío, tengo que cumplir mi papel de hermano metido, exigente, arrogante y sobre todo posesivo.


Roxas que tomaba un trago de agua del vaso sobre la mesa del centro se atraganto y empezó a toser sin control, hasta que se recuperó aun jadeando, volteó a ver a Ven…


            -Estás Loco, que te den… si creer que te voy a contar que fue lo que paso en la noche, eso… simplemente no es de tu incumbencia…


La sonrisa de Ven, se podría decir que era de oreja a oreja, así que lo siguiente en su interrogatorio kilométrico, ya era el turno de amenazar para conseguir lo que se quería.


            -Sabes… creo que mama y sobre todo papa se enojarían si les dijera que su hijo menor, gasta su dinero para que le dejen el orto más abierto que la tapadera de un baño.


            -No serias capas… de decirle a Cloud… amenazo Roxas, a un Ven que se reía de la situación… Además… Rápidamente busco en su disco duro algo para contraatacarle a Ventus y de paso ganar algo de tiempo en lo que se le ocurría algo mas con que amenazar.


            -Oh… quieres probarme…


            -Yo les diría que… que… que…


            -Di un maldito verbo de una vez.


            -Que a ti te gusta chupar pollas… sobre todo la de “Vani” o la de “Lea”.


Esta vez Ven, si no sabía que decir, pero una luciérnaga que nada pintaba por ahí, encendió su luz encima de la cabeza de Ven.


            -Les diré que te gusta travestirte.


            -Eso no es cierto… Respondió rápidamente Roxas, derrotada y  cansadamente suspiro… bien tú has ganado… te diré todo…


Así paso la mañana; Roxas conto con lujo de detalle a su entrometido hermano, toda la acción que realizo en la noche… obviamente  se saltó algunos bloques de información, como el hecho de que era un prostituto, que el prostituto buscaba a Sora, que fue un error y sobre todo que el sujeto era un completo desconocido…


Al finalizar el monólogo de Roxas, Ven se hundió en el Sofá, opuesto al de Roxas, con una sonrisa Ven pregunto.


            -Y como se llama… necesito castrarlo lo antes posible…


            -Se llama Riku…


Así paso otra entretenida tarde entre hermanos, y tal como Riku había predicho, Roxas camino muy abierto ese día cosa que le causo demasiada risa a Ventus, así como las muecas que hacía el pequeño rubio a la hora de sentarse… El trasero de Roxas estaba roto… necesitaba un descanso, unas vacaciones.


Llego la hora de la despedida, Roxas con el culo en llamas se sentó y se volvió a topar con la tarjeta de Riku, suspiro cansadamente,


-Atrapa Sueños, eh… sonrió al recordar lo sucedido la noche anterior.


Ciertamente le gusto la forma en la que fue hecho pedazos la noche anterior. Así que meditando entre lo que era o no correcto se rindió, ajeno al pensamiento de cierto albino que se encontraba en la misma disyuntiva que el…


Su corazón se quedó en el apartamento número 94, ese rubio lo desubico tanto que después de su salida de su apartamento, se tiró a Sora pero no fue lo mismo, el rubio tenía una chispa (Igual que un transformer) especial lentamente se fue quedando dormido pensando en el perfecto cuerpo del Rubio.


El fin de semana se pasó más rápido que inmediatamente, Roxas se encontraba perdido, presente pero al mismo tiempo ausente, solo se imaginaba el escultural cuerpo del albino… siendo esto notado por sus tontos y lerdos amigos Sora y Hayner.


            -Roxas… estas aquí… pregunto algo nervioso el rubio de ojos marrones.


La única respuesta fue un largo y profundo silencio, demostrando que Roxas, no estaba presente, su retorcido mundo era el hogar en esos momentos del pensamiento de Roxas, que solo se imaginaba siendo tomado como le gustaba por el albino.


El albino estaba igual… hasta que sintió algo húmedo correr por su cuerpo, le habían vertido todo un jarrón de agua.


            -Espabila tío… o que tan mal te dejo el último cliente, respondió un sujeto de cabellera rubia que después daba vuelta, para coger su sitar y ponerse a tocar una melodía lo más estrambótica que se podía, alterando la calma que hasta hace unos quince segundos reinaba.


            -Vete al demonio, respiro Riku, lanzándole un zapato a la cara del pobre músico.


El tiempo se esfumo más rápido que las atracciones de un parque temático, los dos tortolos se encontraban siempre suspirando el uno por el otro, pero ninguno se armaba de valor para llamarlo en caso de Roxas, o de ir personalmente a su casa en caso de Riku.


Hasta que Roxas, reunió el valor suficiente, después de dos cervezas sin alcohol cualquier coge valor no. Marcando temerosamente desde su teléfono de última generación que quien sabe de dónde saco y espero. El primer sonido, segundo sonido, tercer sonido, cuarto sonido, quinto sonido y justo cuando iba a colgar, se escuchó una voz del otro lado de la línea.


            -Diga… se escuchó del otro lado del teléfono… era la voz de Riku, Roxas, esbozó una sonrisa luminosa…


            -Riku… respondió Roxas por los nervios…


            -Roxas… Roxas… eres tu… volvió a preguntar el albino al creer que su pervertida mente le daba una mala pasada.


            -Riku… soy yo Roxas, te necesito… necesito tu compañía esta noche…


De pronto la llamada se cortó… con una sonrisa tatuada en su rostro Riku, se bañó y se vistió con lo mejor que tenía en su armario (mejor dicho lo que le quedaba limpio en ese momento), cogió su bocho (Por si alguien no sabe que es, es un escarabajo Volkswagen).


Acelero todo lo que su “poderosa” nave podía resistir con dirección al edificio E, apartamento número 94. Podría por fin decirle al rubio que fue lo que le paso toda esa semana, en la que había rechazado todos los trabajos, hasta había decidido que renunciaría al fin de mes.


Cuando por fin llego a la puerta del apartamento del número 94 tocó la puerta, sintió un hormigueo en su estómago, en sus manos y su miembro que cada vez se ponía más duro. De pronto la puerta se abrió.


            -Riku… Riku eres tú, grito Roxas, antes de lanzarse al cuello del más alto. Te extrañe… no sabes todo lo que eh pensado en ti…


            -Riku, solo abrazo a Roxas y entro en su departamento, cerrando la puerta con el pie. Cuando por fin se pudo alejar sonrió revolvió al ya revuelto cabello de Roxas y respondió.


            -Yo también no eh podido sacarte de mi cabeza, en esta última semana, pienso en ti en donde quiera que estés, rogaba para que nuestros pesares pasasen y volviésemos a estar juntos de nuevo.


La sonrisa de Roxas, iluminaba la habitación, poco a poco se fueron acercando hasta fundirse en un suave y tierno beso, que demostraba que el amor no siempre es a primera vista pero que siempre llega a su destino, sin importar el destinatario.


            -Te amo Roxas, no dejare que nada ni nadie nos separe, dejare de ser un prostituto por ti.


            -Yo también te amo Riku, y quiero que seas mi novio.


            -Hecho, dijo Riku, antes de volver a fundir sus labios con los de Roxas.


Poco a poco fue subiendo la temperatura en el apartamento, a la mañana siguiente solo se encontraba un desastre esparcido que delineaba desde la entrada al apartamento hasta la cama. Así como dos adolescentes con un incremento de hormonas, acostados y abrazados muy juntos, en una cama para una persona.


Riku, se levantó, pero se quedó un tiempo más viendo la belleza de su rubio novio, decido hacerle el desayuno a su bello durmiente. Se encontraba cocinando cuando un par de manos rodearon su cintura. Riku se volteó para toparse con su somnoliento novio.


            -Porque me dejaste solo…


            -Porque te iba a preparar el desayuno…


Así pasó su mañana llena de mimos de parte de los dos hasta el ocaso, que lo miraban por el balcón del apartamento, ya el cielo estrellado lleno de CO2, envolvía la ciudad, dándole un toque rojizo romántico a ojos de Roxas y Riku.


            -Sabes eres lo mejor y más inesperado que me ha pasado en la vida.


            -Tú también rayo de sol, dijo abrazándose más al rubio.


            -Te amo, te amo con todo mi ser no dejare que nadie te lastime, lo juro, menciono seguro de sí mismo Riku.


            -Yo también te amo, y no dejare que nos separen jamás. Respondió Roxas.


Para luego los fundirse en un cálido y tierno beso que expresaba todas sus emociones, todos sus sentimientos. Esperando que el futuro les deparara algo mejor. 

Notas finales:

Eh... Ya sucumbieron a la oscuridad porque yo desde que tiempos.


Bueno que os ha perecido escupitajos y halagos hacedmelos llegar, toda critica es buena (Sin importar si ya ha pasado mucho tiempo desde su actualización)...


Debido a que cierta autora (Lease la de haya arribita), este One Shot pasara a ser un Two Shot, en el siguiete cap tratara de lo sucedido entre Riku y Sora, así como describir todo el caleidoscopio de emociones que el par de imbeciles tuvieron en la semana de distanciamiento...


Saludos desde Antigua Guatemala


Sayonara


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