Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sedúceme por Haruka Eastwood

[Reviews - 130]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola!! Espero que esta nueva locura sea de su agrado. 

Mi Facebook por si gustan agregarme.

¡A leer! 

Titulo: Sedúceme

Resumen: Después de una odiosa semana de exámenes, Ciel se ve arrastrado a un bar por su amigo Alois, donde por culpa de unas copas de más, demuestra su lado seductor con un moreno de atrayentes ojos escarlata. ¿Será él quien seduce o caerá en las garras de la seducción?

Categoría: Kuroshitsuji

Clasificación: No menores de 16 años

Género: Romance, Erótico.

Advertencias: Lemon.

N° Capítulos: 2 de 17

Por: Haruka Eastwood

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~

Sedúceme

Ciel Phantomhive Pov

Capítulo 2: Sensaciones peligrosas

Había bebido demasiado y sentía mi cabeza dar vueltas, en este punto ya ni siquiera recordaba todo lo que había ingerido, aunque realmente carecía de importancia, después de todo la estaba pasando de maravilla con el idiota de Alois y sus múltiples estupideces. He de decir que me incomodaba en un principio la compañía del tal Sebastián, que no perdía la oportunidad de soltar cada estúpida insinuación, al final simplemente opte por ignorarlo, pasando por alto no solo sus insinuaciones, sino también la de los múltiples hombres que se acercaban a mí para “hablar”, realmente pueden llegar a ser bastante molestos, a tal grado que perdí la cuenta luego de llegar a veintidós proposiciones.

Si estoy metido en un puto bar gay a las dos de la madrugada no es precisamente porque yo sea uno, no tengo nada en contra de ellos, de hecho tengo algunos amigos que lo son, lo que realmente es molesto es que me quieran ligar cuando he dejado más que claro que solo estoy aquí para pasar un buen rato, más no para ir a coger con un hombre.

—¿Podrías quitar esa cara de amargado aunque sea por un rato? —Alois clavo su mirada en mi persona con un gesto bastante divertido que sin duda me desconcertó, por lo que chasquee la lengua irritado y evadí su mirada—. ¡Oh, vamos! Que no seas amargado, mejor toma.

Me ofreció un pequeño tuvo de cristal con una sustancia fluorescente que no tenía ni puta idea de lo que era, aunque lo más seguro es que fuera un tipo de droga. Una cosa es que beba alcohol y otra que me ande tomando esa clase de mierda… claro que tenía curiosidad por probar aunque sea solo una vez, aun así dude en tomar lo que me ofrecía Alois con tanta insistencia.

—Es para que disfrutes más la noche —le escuche decir a Claude quien se acerco más al cuerpo de mi rubio amigo, sujetando por la cintura de una manera bastante comprometedora, hasta que sus labios rosaron su mejilla derecha.

—Como joden… —exclame por lo bajo mientras sujetaba el pequeño tubo entre mis dedos observándolo con detenimiento, no me daba confianza tomarlo, pero a unos metros de nosotros vi a Sebastián que sostenía dos tubos como el mío y se dirigía hacia nosotros con una amplia sonrisa, a lo que solo rodé los ojos mirando de soslayo como Claude sujetaba uno y Alois gritaba «¿Listos?»

Solté el aire retenido en mis pulmones y lo bebí todo de golpe, al mismo tiempo que ese trió de inútiles. No podría describir su sabor ya que no se asemejaba a algo que hubiese probado antes, tan solo me produjo una sensación un tanto curiosa en la garganta que simplemente decidí pasar por alto, para concentrarme en la música que estaba bastante fuerte y en las luces de colores que ambientaban todo el lugar. Mi cuerpo se movía solo en la pista de baile, incluso Sebastián me hizo compañía a los pocos minutos y en algún momento dejo de importarme que estuviera tan cerca de mí, deslizando sus manos por mi cuerpo con cada movimiento sugerente que hacía.

Sentía que mi cuerpo ardía de una manera alarmante, acalorándome a tal grado que comenzaba a jadear y sentir mis mejillas completamente sonrojadas. Tenía una inexplicable necesidad de algo y era frustrante no saber lo que era, tan solo me molestaba esa sensación sofocante. Gire mi vista y observe a Sebastián, moviéndose tan jodidamente bien, notando como varios hombres lo devoraban con la mirada, mientras él solo me miraba a mí con aquellos atrayentes ojos rojos que me hipnotizaban, y me atraían a ellos como polilla hacia la luz.

Antes de darme cuenta ya me encontraba frente a él contoneándome sin pudor alguno haciendo que nuestros cuerpos se rosaran entre sí, y el calor de mi interior aumentara a niveles abismales y casi incontenibles, ansiaba arrancarme la ropa ahí mismo y que esas manos me recorrieran… joder, Joder ¡Joder! Que yo no era gay aun así necesitaba  que él y solo él me tocara.

Su rostro cada vez estaba más cerca del mío y mi corazón no dejaba de latir de una manera tan alocada que temía que en cualquier momento saliera disparado de mi pecho como bala. Estaba preparado para girar el rostro por si el perro intentaba besarme, pero no muy lejos de mis suposiciones sus labios viajaron hasta mi oreja, lamiendo el lóbulo de manera lenta y tortuosa hasta hacerme soltar un vergonzoso gemido que inútilmente intenta acallar con mis manos.

—Y bien… —ronroneo lascivamente estremeciéndome con su cálido aliento—, ¿me dejaras conocerte… a fondo? —me tomo del mentón obligándome a verlo a los ojos aunque mi mirada viajo a sus labios, esos labios de tentación que poseía y anhele probar separando un poco los míos, en una clara invitación que no desaprovecho.

Su lengua delineo mis labios antes de adentrarse de una manera casi desesperada dentro de mí, provocándome sensaciones tan placenteras que nunca creería posibles, haciendo que mi cuerpo se debilitara a tal grado que me vi obligado a aferrarme a su cuello para no caer.

Joder, que el bastardo besaba más que bien, y su lengua… cielos su lengua recorría libremente mi boca hasta encontrar a su compañera de baile iniciando una competencia por ver quién tenía el control del beso, la cual claramente perdí. Para ese preciso momento ya había mandado al carajo todo pensamiento racional y ético que hasta ese momento me atormentaban, porque yo Ciel Phantomhive estaba en un bar gay besándome con un hombre que santo cielo, me provocaba una jodida erección con solo un beso, aquel calor agobiante que me embargaba era remplazado por la imperiosa necesidad de sentir más de aquello.

Y la tensión sexual que existía entre nosotros era más que perceptible para aquellos curiosos que nos rodeaban, posando sus ojos sobre nosotros, mirándonos con morbo como si estuviéramos a punto de darles el espectáculo de su vida, ¡Que se jodan todos y cada uno de ellos! Que si ellos querían ver algo, pues les tengo noticias que yo quiero sentir algo.

—D-Detente —ordené entre jadeos, y teniendo que separarme de aquel exquisito contacto labial. Él me miro curioso y hasta cierto punto confundido por lo que sonreía con altanería y prepotencia al saber que tenía a este perro comiendo de mi mano—. Aquí no —musite por lo bajo volviendo a rosar mis labios con los suyos, presionándolos ligeramente mientras posaba su mano en mi cintura para atraerme más a su cuerpo.

—Como ordene —hablo con mofa dejándome ver aquella sonrisa ladeada y bastante socarrona, mientras sus ojos se entrecerraban un poco, centrando su atención en mi persona hasta obligarme a evadir su mirada—. Por aquí —susurro muy cerca de mi oído con aquel tono de voz lascivo y ronco cargado de placer.

Suelo ser muy observador, por lo que cuando llegamos Alois y yo al bar, pude notar al fondo unas escaleras que eran custodiadas por un tipo algo fornido con expresión osca, joder que parecía traer ganas de matar a alguien, aun así las ignore, ya que ni me intereso saber a dónde conducían, pero en este mismo momento Sebastián me tomo de la muñeca y caminamos hacia ahí, aquel hombre solo hizo un asentimiento de cabeza pronunciando «Michaelis», eh de suponer que será su apellido ya que nunca se lo pregunte.

Me sentía algo aturdido y perdido, como si mi cabeza diera vueltas, haciendo que mi andar fuera algo torpe y patético; cada vez escuchaba más lejos la música, algo así como un sonido de fondo, intente articular algo pero simplemente las palabras no salían de mi boca y mi cuerpo se sentía cada vez más extraño, caliente… necesitado, estaba más excitado que nunca, ni siquiera cuando estuve con Elizabeth sentía esa maldita desesperación, tan jodidamente frustrante.

«Elizabeth» El recuerdo de su sonrisa llego a mi mente, no podía hacerle eso a ella, a la persona que siempre ha estado conmigo y me ha demostrado cuanto me ama. Levante mi mirada para observar aquel cuarto en el que habíamos entrado, aquella mirada rojiza parecía hambrienta e instintivamente solté un jadeo, separe mis labios y mi cuerpo se tenso, debía detener todo esto, pero ya era muy tarde… 

~ * o0O0o ♦ o0O0o * ~

Continuará

Notas finales:

^w^ Gracias por leer ♥ y les quiero invitar a leer mis otros fic's de Kuroshitsuji :3 

+++ Después de un beso... ¿qué pasa?

+++ Ese mayordomo, es paciente

+++ Fantasía hecha realidad

+++ Un trabajo extra

+++ Dámelo todo ¡Sebastián!

+++ Antes de todo

+++ Simplemente mi Bocchan

+++ Mi travieso esposo

Los amo y si les gusto yo encantada de recibir rw. 

Haruka Eastwood


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).