Cuando finalmente llegaron Luhan apenas procesaba lo que pasaba a su alrededor, miró a todos lados sin saber que hacer hasta que el chófer abrió una de las puertas del auto y lo regresó a la realidad, él le sonrió y con mucho cuidado tomó a Sehun para bajarlo del auto, él iba a llevarlos hasta su apartamento y Luhan no sabía ni como agradecer eso.
El tiempo le pareció eterno hasta que por fin estuvieron frente a la puerta de su apartamento, abrió tan rápido como sus temblorosas manos le permitieron hacerlo y guió a Yongguk hasta la habitación de Sehun.
-Debería ir por un botiquín para tratar los golpes-sugirió.
Luhan asintió torpemente y casi corrió al baño de su habitación, cada habitación tenía su propio baño y cada baño contaba con un botiquín pero Luhan estaba demasiado nervioso y fuera de sí para recordar eso y por eso mismo tampoco logró recordar donde estaba el botiquín en su propio baño, el primer lugar donde busco fue en el gabinete empotrado contra la pared, sus manos hicieron un caos y todo lo que ahí había término en el suelo, no encontró el botiquín, ¿dónde estaba?
Se giró bruscamente chocando con él pecho de Yongguk que puso sus manos sobre sus hombros para detener sus nerviosos movimientos, Luhan lo miró afligido y frustrado, él suspiro y le regaló una pequeña sonrisa tranquilizadora dando un pequeño apretón en sus hombros.
-Tranquilo, respiré con calma y relájese-pidió.
-No puedo, el botiquín no está y...
-Shhh-emitió ese sonido poniendo un dedo sobre sus propios labios pidiéndole que se quedará callado-Tiene que respirar un poco y dejar de llorar-indicó.
Luhan asintió lentamente, él sonrió una vez más y se alejó de su lado para ir hacia el gabinete que Luhan había asaltado, él tomó la única cosa que Luhan no había tirado al suelo y se la mostró, era el botiquín.
-Yo me encargo de su hermano, vaya a la cocina y tomé un poco de agua, tiene que calmarse un poco-dijo y nuevamente asintió obediente marchándose a hacer lo que Yongguk le había dicho.
Entró a la cocina yendo directamente al refrigerador de donde tomó una jarra de agua y luego de cinco vasos se dejó caer sobre una de las sillas sintiéndose totalmente agotado, parecía una pesadilla y apenas podía soportarlo.
¿Por qué?, luego de tanto tiempo ¿por qué ahora?, se preguntaba a sí mismo, Lee Youngsuk había sido quién había destruido su vida, ¿por qué tenía que reaparecer en ella?
Habían sido tantos años de esfuerzo para olvidarlo todo, había logrado enterrar todos esos negros capítulos de su vida como para que ahora reaparecieran, no podía, no luego de lo mucho que se había esforzado por olvidarlo todo, no era justo, él era el final e inicio de todo y tenía miedo que todo volviera porque no podría enfrentarlo una vez más, no era tan fuerte.
5 años atrás...
-Vamos, vamos-repetía el mayor que tomaba la mano de su hermano pequeño arrastrándolo a su habitación donde los encerró a ambos.
-Luhan hyung, ya deja de jugar, tengo que volver a mis clases de piano-dijo con voz cansada tratando de hacer al mayor a un lado para salir de ahí.
-Pero Sehunnie-lo detuvo interponiéndose entre él y la puerta-Lo prometiste, además, ¿desde cuándo me llamas "hyung"?-preguntó con una mueca de inconformidad.
-Eres mi hermano mayor, tengo que tratarte como tal, Jongin hyung dice que...
-¡Ya deja a tu precioso "Jongin hyung", no lo soporto!-alzó la voz inconscientemente pero no podía evitarlo, odiaba a ese tipo, él siempre estaba robándole el amor y la atención de Sehun.
-Sí vas a ponerte en así yo me voy-sentenció.
-Sehun espera-pidió tomando su mano-Por favor, no tengo a quién más recurrir-suplicó.
-Está bien-aceptó de mala gana el menor.
Luhan sonrió ampliamente y corrió al pequeño escritorio que había en su habitación sacando de uno de los cajones una cámara que le entregó a Sehun, el menor hizo una mueca pero finalmente lo miró para que hicieran eso de una buena vez.
-¿Listo?-le preguntó a Sehun.
-Supongo-respondió.
Luhan frunció el ceño por la falta de entusiasmo de su hermano pero decidió ignorarlo al final, se levanto la camiseta sosteniéndola con sus dientes para mantenerla en su lugar, sus manos fueron hasta su pantalón, bajo el zipper y desabrocho el botón permitiendo que se deslizaran al suelo por sí solos.
-Tadah-dijo aún con la camiseta entre sus dientes.
Sehun tenía la cara totalmente roja, lo vio tragar duro y sin hacer ningún comentario comenzó a sacar las fotografías que Luhan quería, el menor apenas podía permanecer concentrado y Luhan se sintió orgulloso de lograr ese efecto.
-Ya está-susurró Sehun.
-¿Quedaron bien?-preguntó dejando caer la camiseta.
-Mmm sí-respondió nervioso.
-Eso no ayuda, en tú opinión, ¿me veo bien?-preguntó.
-Mmm no sé...supongo que sí.
-Sehun mírame, tienes que mirarme o no servirá tu respuestas-afirmó.
Sehun tenía las mejillas rojas cuando se obligó a recorrer con la mirada las perfectas piernas de su hermano mayor hasta su zona pélvica cubierta con aquellos bóxers femeninos de delicado encaje negro.
-Se ve bien-murmuró.
-Lo sé-asintió con una sonrisa traviesa.
-¿D-de donde sacaste l-la ropa interior de mujer?-preguntó curioso y nervioso.
-Obviamente la compré bobo-respondió con obviedad-Tengo buen gusto ¿verdad?
-S-sí.
-Pensé que sería más incómodo pero no, es muy suave, ¿quieres tocar?-la cara de Sehun se volvió rojo brillante y comenzó a negar una y otra vez-Tranquilízate, era sólo una broma-rió por la reacción del menor.
-A...a todo esto... ¿por qué tú novio te pidió estas fotografías?-preguntó confundido.
-Vaya que eres tonto, es como un juego, él me pide algo y a cambio también obtendré algo-explicó.
-No me parece bien, ese tipo no me gusta Luhan.
-¿Por qué no?-cuestionó con él ceño fruncido.
-Porque te pide muchas cosas extrañas, además tiene treinta años, es mucho mayor que tú-señaló.
-Sehun ya tengo diecisiete y no necesito que un mocoso de quince me diga cómo vivir mi vida-aseguró.
-Él va a lastimarte, no vayas está noche a verlo, ven conmigo está noche, Jongin hyung hará una fiesta en su casa, será divertido-prometió.
-¡Jongin hyung esto, Jongin hyung aquello, me tienes harto con ese tipo, sí tanto te gusta lárgate tú solo con él!
-¡Pues eso haré pero cuando tu amado Youngsuk te vea la cara no vengas llorando a mí!-dijo antes de salir de su habitación dando un portazo.
Luego de aquella pelea ninguno se dirigió la palabra y cada uno se fue por su lado, Luhan estaba furioso con Sehun y lo único que podía pensar era que deseaba que la estúpida fiesta con su adorado Jongin fuera un asco, todo fue como de costumbre, Luhan esperaba al chófer de Youngsuk en el mismo lugar de siempre y luego él lo llevaría a donde su novio lo estaría esperando.
Youngsuk era un hombre importar y muy ocupado así que tenían que verse a escondidas, él era menor de edad después de todo y por eso no podrían decir nada de su relación hasta que él cumpliera la mayoría de edad.
Ese día debía ser especial porque cumplían dos años juntos y en verdad estaba feliz, Youngsuk había llegado a su vida en él mejor momento y lo había salvado de lo que posiblemente habría sido su peor error, cuando llegó al hotel donde esa noche se verían Luhan apenas podía contener su emoción.
-Hola-lo saludó felizmente con un pequeño beso como siempre hacia.
-Feliz aniversario cariño-le dijo él dándole otro pequeño beso.
-¿Y mi regaló?-preguntó con un puchero.
Él rió ligeramente dándole un beso en la mejilla antes de alejarse para ir a la habitación, regresando con una pequeña caja entre sus manos, él la abrió mostrándole un bello collar de plata con un dije con forma de una nota musical, Luhan quería ser cantante y sin duda le fascinó.
-Gracias-chilló abrazándolo con fuerza.
-Me alegra que te guste, date la vuelta para que te lo ponga-indicó.
Luhan obedeció de inmediato, el collar se sentía frío contra su piel pero aun así sonrió cuando lo sintió al rededor de su cuello.
-Te queda perfecto-susurró Young contra su cuello antes de besarlo.
Las mejillas del menor se volvieron rojas y todo su cuerpo se estremeció al sentir sus labios sobre su piel, Young hizo que se girara para estar de frente y unió finalmente sus labios iniciando una suave y lenta danza con sus labios pero la magia se rompió cuando la puerta se abrió de golpe y una bonita mujer rubia y embarazada entró.
-¡LO SABÍA!-gritó ella-¡SABÍA QUE ESTABAS REVOLCÁNDOTE CON ALGUNA PUTA!
Luhan miró confundido y asustado a la furiosa mujer y luego a Young, no entendía absolutamente nada.
-¿Young quién es ella?-preguntó angustiado.
-¡CÓMO SÍ NO LO SUPIERAS PEQUEÑO CUALQUIERA!-le gritó.
-Young-llamó temeroso.
-¡¿CREÍSTE QUE JAMÁS LO IBA A DESCUBRIR, CREÍSTE QUE TÚ ESPOSA ERA UNA TONTA?!-ella estaba como loca-¡VOY A DESTRUIRLOS, A TI Y A TÚ PEQUEÑO PUTO, VOY A QUITARTE HASTA EL ÚLTIMO CENTAVO!-amenazó.
"Esposa", esa palabra hizo pedazos él corazón de Luhan, eso no era verdad, tenía que ser una mentira, esa mujer metía, se repetía sin parar en su cabeza, miró a su novio en espera de que él le dijera que todo eso era falso, que él no la conocía y que lo amaba pero esa noche él descubrió lo estúpido e ingenuo que era.
-Amor por favor escucharme, yo jamás quise hacerte esto, él me sedujo, fui débil y lo siento-dijo él desesperado.
Su corazón se hizo trisas en ese mismo instante, sus ojos se llenaron de lágrimas, miró al hombre que supuestamente lo amaba suplicándole a esa mujer su perdón, las palabras no salían y sin saber que más hacer salió corriendo sin saber a dónde.
Corrió sin rumbo hasta que sus piernas dolieron y entonces cayó de rodillas llorando como un loco, miró el collar en su cuello y lo arrancó arrojándolo lejos, ¿por qué le había hecho eso?, esa era su única pregunta pero no logró encontrar la respuesta, no supo cuanto tiempo pasó vagando por las calles hasta que volvió a casa, su papá había ido a una cena con unos inversionistas y Saejin lo había acompañado así que nadie le diría nada esa noche, se arrastró hasta su habitación aun con las lágrimas corriendo libremente y lo primero que vio al entrar fue a Sehun sentado en su cama.
Se quedó ahí, de pie frente a la puerta sintiéndose aun más estúpido al estar Sehun ahí, él se lo había dicho tantas veces y nunca lo había escuchado que sí ahora el menor quería reírse en su cara por ser un imbécil lo tendría bien merecido.
-Tenías razón ¿bien?, ahora lárgate para que pueda llorar por lo imbécil que soy-dijo.
-Xiao Lu-lo escuchó decir e inmediatamente supo que algo estaba mal-Me mentiste-dijo con un hilo de voz.
-¿Sehun?-preguntó llorando sin saber por qué.
-Dijiste que la primera vez siempre era especial-la sangre se le congelo y su corazón se detuvo al escucharlo decir eso-Y no es verdad...fue horrible...y dolió...dolió mucho-Sehun lo miró entonces, estaba sonriendo pero sus ojos no reflejaban nada, era como ver un casaron vacío, Luhan corrió hacia él y puso su manos sobre sus hombros.
-Hunnie, ¿qué te hicieron?-le preguntó temiendo la respuesta.
Sehun no contesto y comenzó a llorar con fuerza, la desesperación creció en su interior y comenzó a mover con más brusquedad el cuerpo de Sehun que sólo lloraba.
-¡SEHUN CONTÉSTAME!-gritó.
-Yo no quería...les pedí que se detuvieran-sollozó.
-¡¿QUÉ FUE SEHUN, QUÉ TE HICIERON?!-volvió a gritar.
-Me...ellos me...violaron...
Luhan cayó de rodillas frente a Sehun, su corazón se había detenido y Sehun parecía estar cayéndose a pedazos frente a él, sus brazos lo envolvieron y comenzó a llorar con la misma fuerza que Sehun lo hacía, todo era su culpa, sí él hubiese acompañado a Sehun a esa maldita fiesta nada le hubiese pasado, era su culpa.
-Perdóname Hunnie, perdóname-repetía en medio del llanto.
Sehun no respondió y sólo se aferraba a él preguntándose ¿por qué a él, por qué Jongin no había ido en su ayuda por más que había gritado su nombre?
Esa noche ambos descubrieron algo más, las lágrimas podían terminarse pero no él dolor, cuando el sol comenzaba a salir las lágrimas ya no estaban pero ambos sentían que ya nada importaba y que podrían morir, Luhan fue el primero en moverse, tomó entre sus manos el rostro de su hermano menor distinguiendo entonces los moretones en él, quiso volver a llorar pero ya no había lágrimas, todas se habían acabado anoche.
-Voy a protegerte, te juró que vamos a salir adelante-prometió.
-Luhan-dijo aferrándose aun más a él.
-Vamos a salir adelante, yo voy a sostener tú mano durante todo el camino-aseguró.
Esa había sido la promesa que se hicieron pero nunca contaron con lo que su padre deparó para sus futuro, la esposa de Youngsuk armó un escándalo y pronto todo mundo había girado a juzgar, señalar y condenar al estúpido chiquillo de diecisiete años, ella era la pobre víctima porque estaba embarazada y él, él era un cualquiera que había destruido la familia de un inocente que ni siquiera había nacido.
Ella y su ingenuidad le destruyeron la vida, su padre no podía con la vergüenza y a Luhan no le importaba porque lo que en realidad era importante era Sehun, tenían que encontrar a quienes lo habían lastimado y hacerlos pagar pero al saber lo que le había pasado a Sehun su decidió que lo mejor era que Sehun callara para que nadie lo supiera, "ya suficiente vergüenza tenían con sus estúpidos errores como para sumar los de Sehun", eso había dicho su padre y ese mismo día decidió enviarlo a China lejos de Sehun, esa había sido la despistada solución, al final los separarlos en el momento en el que más se necesitaban.
Luhan no lo vio venir en ningún momento, su padre había entrado a la habitación de Sehun, en cuanto vieron a sus escoltas supieron que algo malo iba a pasar, Sehun se aferro a su cuerpo y Luhan inmediatamente miro a su padre, dos de los hombres se acerco a ellos Luhan gimió de dolor cuando su brazos fue apresado con fuerza y ese hombre comenzó a alejarlos.
-¡LUHAN!-gritó Sehun estirando sus brazos para impedir que los separaran.
-¡SEHUN!-gritó también tratando de alcanzar su mano pero eso hombre los alejaba cada vez más.
-¡NO, POR FAVOR NO, PADRE TE LO SUPLICO!-imploro su hermano menor cuando corrió tras él siendo frenado por su padre en la puerta de la habitación.
-Es lo mejor Sehun, es por su bien debes entenderlo y terminar este ridículo teatro-dijo su padre empujándolo al interior de la habitación y cerrando la puerta de la habitación con llave.
-¡NO QUIERO, LUHAN POR FAVOR NO TE VAYAS!-gritó mientras golpeaba la puerta para salir de la habitación.
-¡SEHUN TE JURO QUE VOLVERÉ, VOLVERÉ A BUSCARTE TE LO JURO!-prometió, no lo iba a detener, su padre no iba a detenerse y lo único que podía hacer era eso.
-¡BASTA, NO QUIERO ESTO, NO ME SEPAREN DE LUHAN!-lo escucho gritar una última vez antes de que lo obligaran al subir al auto que lo llevaría al aeropuerto.
Lloró durante todo el trayecto y a su padre no le importó le suplico para que dejara quedarse pero él lo ignoró, nada funciono y ahora ese cruel hombre estaba ahí mirándolo de frente dándole un hipócrita abrazo mientras le decía que lo iba a extrañar y que tenía que ser bueno.
-Esto es por el bien de ambos, te prometo que Sehun tendrá un tratamiento para superar lo que pasó-dijo su padre cuando estaban en la puerta de embarque.
-Lo odio, lo odio con todo mi ser, no sabe el asco y vergüenza que siento al ser su hijo-masculló entre dientes.
-Luhan no sabes lo...
-Voy a regresar, pero sólo regresare para llevarme a Sehun conmigo-dijo antes de dar media vuelta y subir al avión que lo llevaría a China, lejos de su Sehun.
Estando en China perdió todo contacto con Sehun porque su padre se encargo de que ni siquiera pudiera hablar con él, se había esforzado por años en levantar su nombre y volverse alguien independiente, cambio sus sueño de ser cantante y se volvió un actor porque de esa forma logró hacerse de independencia, de esa forma pensó que podría protegerlo a él pero ahora se daba cuenta que estaba fracasado con su único propósito en la vida, su único objetivo era él de mantener seguro a Sehun y no podía hacerlo, lo estaba haciendo todo mal, porque al fianza Sehun siempre terminaba lastimado por su culpa.