Cuando el sol salió ninguno de los dos se dio cuenta porque no fue la ligera luz que se colaba por la ventana lo que hizo que él se despertara sino la escalofriante sensación de está siendo observados.
Luhan la había experimentado por años por lo que para él esa sensación era inconfundible y por eso abrió los ojos únicamente para encontrarse con la furiosa expresión de su tío Jaejoong que parecía estar listo para asesinar a Sehun que continuaba profundamente dormido.
-T-tío-balbuceó nervioso.
-¡Levántate ya pequeño vándalo secuestrador!-rugió el furioso hombre consiguiendo que Sehun abriera los ojos de golpe y palideciera al verlo.
Sehun se despertó de golpe y al ver la expresión homicida del otro hombre se abrazó más al cuerpo de Luhan, el hombre pareció enfurecerse más por la atrevida acción y fue el turno de Luhan para aferrarse a Sehun que parecía estar por desmayarse.
-¡Su nidito de amor es precioso!-chilló Rousse entrando a la cabaña y rompiendo con sus tonterías la aplastante tensión-¿Te imaginas todo lo que sucedió anoche aquí Juliet?-le preguntó a su escolta que grababa cada centímetro de aquel lugar.
Ambos chicos escucharon gruñir al hombre mayor y Sehun le envió una mirada fulminante a esa loca, ya bastante malo era ser encontrado por Jaejoong en una cama abrazado a Luhan como para que la pervertida de Rousse le echará más leña al fuego con sus retorcidas ideas.
-¡N-no hicimos nada!-se apresuró a decir Luhan que estaba completamente sonrojado.
-¡No te creo!-sentención la desquiciada chica-Además…tú argumento es muy débil cuando ni siquiera traes puesta la misma ropa de ayer-se cruzó de brazos esbozando una sonrisa triunfante cuando Luhan no supo que decir.
Sehun tragó duro al ver al señor Jaejoong que parecía estar listo para despellejarlo vivo y luego le envió una mirada asesina a Rousse que huyó despavorida al verlo, volvió al mayor que tenía la mandíbula apretada y sus ojos destilaban puro odio hacia su persona.
-No hicimos nada y en todo caso sí lo hiciéramos no sería de la incumbencia de nadie puesto que ya no somos ningunos niñitos y se trata de nuestra intimidad, Luhan estaba mojado y yo también, no íbamos a dormir de esa forma así que tomamos ropa prestada-explicó con calma pero el mayor seguía igual de enojado.
-¿Por qué rayos salieron así como así en primer lugar?-preguntó con voz más calmada pero sin borrar su ceño fruncido.
-Bueno yo…
-Yo se lo pedí-se adelantó Luhan recibiendo una mirada sorprendida de su tío y de Sehun-Estaba aburrido, Lay y Rousse no dejaban de acosarme y tanto usted como Suho hyung nos miraban como si hubiésemos matado a alguien y todo eso estaba molestándome mucho-explicó, su tío iba a culpar a Sehun de todo si no decía nada y era por eso que estaba mintiéndole al mayor porque ya todo era muy difícil con él y no quería que las cosas empeoraran.
-Xiao Lu, tú sabes que el hecho de que yo no…
-Lo sé pero es un fastidio y lo odio por eso no podía seguir en ese lugar aun cuando Sehun dijo que todo podía ser una mala idea, no lo escuché y por eso terminamos perdiéndonos, Sehun me trajo aquí para mantenerme seguro-dijo mientras su tío lo miraba atentamente.
Jaejoong no pudo evitar sonreír ante lo malo que eran esos dos al mentir, no servía de nada una mentira tan bien elaborada como la que Luhan estaba diciéndole si el menor no lo miraba a los ojos y Sehun únicamente lo miraba con preocupación, esos dos niños eran un caso.
-Está bien-asintió tranquilamente-Vístanse y vayamos a casa que apenas pude controlar al hermano mayor de Sehun para que no llamara al ejército para que lo buscaran-suspiró al recordar al histérico hombre.
-¿Cómo supo donde estábamos?-preguntó Sehun antes de que saliera del lugar.
-No están muy lejos de donde estamos quedándonos, de hecho si miran por la ventana podrán verlo-explicó señalando hacia la ventana por donde podían apreciar a los lejos un poco de la cabaña más grande-Anoche la señorita Rousse notó desde su ventana que las luces prendidas de este lugar y fue a comentármelo a mí porque tú hermano mayor tuvo que ser sedado para no hacer una estupidez como salir a buscarlos en medio de la noche y la lluvia, investigué un poco y gracias a Jongdae descubrí que aquí realmente no vive nadie y que el cuidador de la cabaña principal solo se queda aquí algunas veces y esa noche estaba con nosotros planeando que hacer para poder salir a buscarlos por la mañana por eso deduje que debían ser ustedes o un ladrón pero ningún ladrón vendría hasta acá solo por un par de cosas y se quedaría tanto tiempo aquí-dijo con un suspiro.
-Ya veo, muchas gracias por controlar a Suho hyung.
-No me lo agradezcas, yo realmente planeaba noquearlo pero ese hombre llamado Jungsoo no me dejo y en lugar de eso usaron uno de los sedantes que Minseok traía con él-se encogió de hombros antes de salir de la habitación para esperarlos afuera.
Sehun suspiró pesadamente al imaginar lo histérico que Suho debía de haber estado y el sermón que lo estaba esperando en cuanto llegara, miró a Luhan cuando se levantó de la cama, envuelto con una de las mantas y se metió al baño para salir segundos después con la ropa de ambos y una mueca de desagrado.
-Sigue húmeda-dijo haciendo un lindo puchero.
-No tenías porque haberle mentido a tu tío sobre lo que realmente pasó-comentó.
-Pero sí no lo hacia él iba a culparte de todo como siempre y no podía dejarlo-aseguró.
-Fue mi idea por eso es mi culpa-le recordó.
-No me obligaste a venir además nada malo me paso, estoy bien-sonrió.
-Está bien-asintió antes de también ponerse de pie e ir al armario para obtener unos pantalones y calzado.
-Mi tío Jaejoong dijo que el dueño del lugar está en la otra cabaña, ¿no crees que se enoje si nos ve usando sus cosas?-inquirió.
-Cuando lleguemos hablare con él y le pagare todo lo que usamos pero para no abusar cúbrete con la manta-pidió.
-¿Estas diciéndome que esperas que vaya hasta donde los demás nos esperan cubierto únicamente con una manta, una camiseta y unos bóxers?-inquirió, de ser un sí él no iba a salir de ahí.
-No, te digo que voy a llevarte yo pero no quiero que nadie te vea así que cúbrete con la manta-ordenó.
-¿T-tú vas a llevarme?-preguntó sonrojado.
-Sí-asintió-Sube a la cama para que pueda cargarte en mi espalda-indicó.
Luhan miró indeciso la cama y luego a Sehun, el peli plata le sonrió y solo eso necesito para obedecer su petición y subirse a la cama como Sehun le había dicho que hiciera, Sehun se paró delante de él, rodeó con sus brazos su cuello sosteniendo con fuerza dos de las puntas de la sabana para que lo cubriera bien, escuchó a Sehun reír logrando con ello que se sonrojara mucho más.
-Tus piernas-habló, Luhan obedeció rápidamente poniéndose totalmente rojo cuando las manos de Sehun sujetaron sus piernas desnudas-¿Listo?
-S-sí-susurró avergonzado.
Ambos salieron de la pequeña cabaña ganándose una mirada de desagrado de parte del señor Jaejoong y una mirada maravillada de Rousse que chilló emocionada y comenzó a jalonear a Juliet para que grabara cada segundo de la hermosa escena.
Pero a diferencia de Rousse la escena no fue muy bien vista por Suho y Lay que ya los esperaban en la entrada, Donghae se unió a la entusiasmada chica que no dejaba de decir que aquello era simplemente hermoso, Leeteuk y Jongdae les sonrieron aliviados al verlos sanos y salvos porque era lo único que habían deseado.
-¿Dónde está Minmin que se está perdiendo esto?-preguntó Rousse.
-Su madre y su hermana lo están ayudando a dar los toques finales a todo y a prepararse-respondió Jongdae con una inmensa sonrisa porque ese era su día, el más feliz de todos.
Luhan miró a todos lados notando que efectivamente había mucho movimiento por todos lados, su mirada viajó por todo el lugar hasta donde pudo ver un área donde ya había un montón de sillas y varias mujeres adornaban con flores, hasta donde sabían todos ahí sería la ceremonia y el banquete sería en la parte trasera de la cabaña.
-¡¿Se puede saber donde han estado?!-exigió saber un alterado Suho.
-Nos perdimos-respondió con simpleza Sehun.
-Se perdieron-bufó Lay-Eres un irresponsable por poner en peligro a Luhan de esa forma-soltó mirándolo con odio.
-¿Seguro que es eso lo que te molesta?-inquirió con una sonrisa de lado-¿No será más bien que el verdadero problema es que Luhan y yo desaparecimos toda la noche y te carcome la rabia por no saber que paso mientras estábamos lejos y solos?-remarcó la última palabra logrando que Lay rechinara los dientes.
-Basta ya los dos, este día es muy importante para mí y ustedes no van a hacer nada para amargármelo-advirtió Jongdae con el ceño fruncido-Lo cual me recuerda, la persona que iba a entregar los anillos llamó para decirme que no iba a poder llegar-murmuró un tanto nervioso.
-¿Y que harás?-preguntó preocupada Rousse.
-Bueno lo pensé mucho y por eso estaba esperando que ustedes regresaran-explicó.
-¿Vas a pedirme entregar los anillos?-inquirió Sehun.
-¡Por supuesto que no te lo pediría a ti!-exclamó rápidamente-Luhan… ¿podrías hacerlo, por favor?-suplicó.
-¿Y-yo?
-Sí, ¿por favor?-insistió.
Luhan miró la mirada suplicante de Jongdae y recordó como él los había ayudado en Jeju además de darle la mejor navidad que había tenido en años, se lo debía y únicamente iba a llevar los anillos, no era algo imposible.
-Por supuesto que lo hare Jongdae hyung-respondió sonriente.
-¡Muchas gracias Luhannie!-chilló feliz e intentó abrazarlo siendo frenado por Sehun.
-Ni se te ocurra tocarlo-advirtió.
-Posesivo-masculló el mayor por lo bajo.
-Lo sé-suspiró Rousse con voz soñadora y brillantes ojos-Pero deja de estar ahí parado como un imbécil y ve a prepararte ahora-ordenó la chica comenzando a arrastrar al mayor hacia el interior de la cabaña-Tú también ve a tu habitación Lulu, enseguida estoy contigo-aseguró guiñándole traviesamente.
Rousse estaba más que feliz ese día y Luhan se vio obligado a acompañarla de un lugar a otro porque ella se lo dijo, ayudaron con toda la decoración, con la comida y de no haber sido porque la hermana de Minseok no la dejo pasar incluso hubieran ayudado a Minseok a prepararse, no le permitió ver a Sehun hasta que la hora de la ceremonia llego porque dijo que todo iba a ser una sorpresa para él.
El traje que ella le había obsequiado le quedo a la perfección, que ella lo arreglara con tanto detalle y esmero le recordó de alguna forma a la madre de Lay, ella había sido igual de cuidadosa y detallada el día que lo había ayudado a mejorar su imagen.
Cada detalle fue cuidadosamente hecho y al terminar Rousse le dio una mirada satisfecha por su resultado dejándolo mirarse al espejo, Luhan sonrió tímidamente ante su reflejo porque siempre sentía como si mirara a otra persona en esos momentos.
-Pareces un ángel-lo halagó Rousse.
-No, yo no…no lo creo debe ser la ropa y todo eso-aseguró.
-No, tú realmente eres muy guapo Luhan, cualquiera lo nota y tú deberías hacerlo también.
-Yo no creo que…
Tal vez si pudieras quitarte estas gafas y ver claramente tú serías capaz de darte cuenta de que todas las veces que digo que eres hermoso no miento, tal vez así tú podrías ser capaz de ver por ti mismo ese par de hermosos ojos que las gafas ocultan, te darías cuenta también de lo impresionante que luces cuando sonríes y la capacidad de opacar todo a tu alrededor simplemente con esa simple acción…
Sus mejillas se ruborizaron cuando esas palabras que habían sido dichas alguna vez por Sehun se repitieron y Rousse no contuvo su sonrisa al darse cuenta de aquello porque sabía perfectamente que o más bien quien lo causaba.
-¿Sehun te lo dice mucho?-preguntó con una sonrisita traviesa.
-Él…me lo decía incluso antes de que yo decidiera cambiar mi apariencia…jamás le importo mi físico porque…él fue cautivado por mi sonrisa-murmuró.
-Eso habla muy bien de él y de sus sentimientos-aseguró-Y bueno ya que estas listo, salgamos ya que Sehun tiene que verte-dijo empujándolo hacia la puerta para hacerlo salir.
Se encontraron con su tío Jaejoong antes de llegar a las escaleras, él lo miraba con una expresión que Luhan no pudo descifrar y lo puso muy nervioso hasta que lo vio sonreírle cariñosamente cuando estuvieron de frente a él.
-¿Qué tal?-preguntó Rousse presumiendo su buen trabajo.
-Maravilloso-halagó.
-¿Verdad que sí?-inquirió entusiasmada.
-N-no creo que sea para tanto-habló con nerviosismo.
-Te pareces tanto a Lili-aseguró.
Luhan se sorprendió un poco antes de sonreír con algo de melancolía, era el mejor cumplido que nadie le hubiera hecho, su madre era el más hermoso de los ángeles para él y que le dijeran que se parecían era mucho mejor que alguien llamándolo hermoso o guapo.
-Gracias-susurró para que nadie notara su voz quebrada.
-Bueno, es hora de bajar y alguien está esperando por ti-comentó con molestia señalando hacia las escaleras.
Los nervios comenzaron a revolverle el estomago cuando vio a Sehun mirarlo desde abajo mientras bajaba las escaleras, sus ojos buscaron la puerta en caso de no poder con el deseo de salir corriendo y en cuanto llego al último de los escalones la mano de Sehun busco la suya entrelazándolas dejándolo sin oportunidad alguna de huir.
-Brillas más que cualquier otra estrella-halagó.
Las piernas de Luhan comenzaron a temblar, su corazón chocaba violentamente contra su pecho, su rostro debía ser más rojo que cualquiera de las rosas que había adornando el lugar y su estomago era un tornado de mariposas.
-¿Pueden besarse ya?-preguntó su impaciente amiga que vídeo grababa todo.
Luhan le envió una mirada reprobatoria que fue interrumpida al poco tiempo por Sehun acunando con cuidado su rostro para obtener su atención de vuelta y besarlo suavemente en los labios haciendo que sintiera como si estuviese derritiéndose entre sus manos.
La ceremonia empezó poco tiempo después de que ambos salieran, la felicidad que Minseok y Jongdae reflejaban parecía algo irreal pero no lo era y Luhan realmente deseó con todo su corazón algún día llegar a verse así de feliz, deseó que todo lo que entonces parecía en su contra desapareciera y de esa forma poder ser tan feliz como la pareja que sus ojos veían.
Los nervios volvieron cuando fue hora de entregar los anillos pero valió la pena cuando pudo ver las expresiones de ambos, había algo muy especial en ver la sonrisa de alegría de Minseok que no se borraba ni aunque ya hubiera lágrimas que debían ser de pura felicidad, Jongdae también parecía a nada de llorar pero lo controlaba mejor que el otro, un suave sollozo escapó de los labios de Minseok cuando el anillo se deslizó en su dedo anular y Luhan se descubrió a sí mismo queriendo sentirse tan feliz como ellos.
La ceremonia finalizó con un beso que sellaba la promesa de un para siempre entre los dos y todos aplaudiendo de pie, tal y como recordaba la fiesta continuó en la parte trasera de la cabaña donde todos reían y felicitaban a la pareja de recién casados.
Rousse no paraba de hablar y Luhan le ponía toda la atención del mundo para ignorar la intensa mirada de Lay, la tarde se fue dando paso a la noche y fue entonces que Sehun tomó su mano y lo sacó de la fiesta aprovechando que nadie los miraba, caminaron tranquilamente charlando de cosas sin importancia referentes a ese día hasta que nuevamente estuvieron de vuelta en el lugar donde había sido la ceremonia parados en el mismo arco hecho de rosas rojas y blancas donde anteriormente habían estado Jongdae y Minseok.
-¿Te gusto la boda?-preguntó repentinamente Sehun.
-Sí, fue muy lindo todo y ellos se veían tan felices, realmente me gustaría algo así cuando me case-dijo sin darse cuenta y al notarlo se maldijo internamente mientras se sonrojaba-N-no es que…que quiera casarme, yo…
-¿No quieres casarte?-preguntó con el ceño fruncido.
-N-no di-digo sí, lo…que quise decir f-fue que…m-me gustaría casarme en un lugar como este-balbuceó nervioso.
-¿Te quiere casar aquí?-siguió preguntando.
-Yo…su-supongo que cualquier lugar estaría bien…pero…
-Entiendo-interrumpió Sehun-Entonces…
Luhan abrió los ojos por completo cuando lo vio ponerse de rodillas frente a él y tomar su mano, dejó de respirar y los sonidos de la fiesta que aun seguía desaparecieron por completo porque lo único que escuchaba era su propio corazón correr a toda prisa.
-No tengo un anillo ahora pero pretendo dártelo después-dijo mostrándole una dulce sonrisa.
-¿Q-que…?
-¿Te casas conmigo?-preguntó, Luhan se desconectó del mundo entero y un nudo se formo en su garganta mientras intentaba no llorar porque aunque esa vocecita que trataba de hacerlo pensar con lógica no paraba de decirle que eso era una tontería porque eran muy jóvenes todavía no dejaba de sentirse emocionado-Yo…sé bien que aun somos jóvenes y todo eso…falta mucho pero…yo de verdad quiero pasar toda mi vida contigo-aseguró.
-S-sí, sí quiero-respondió por fin lanzándose a los brazos de Sehun que lo recibió más que feliz.
Eran jóvenes eso ambos lo tenían claro pero algo les decía que no podrían ser felices sin el otro, también todo parecía estar en su contra pero iban a enfrentarlo juntos porque habían prometido estar siempre juntos sin importar nada más, Sehun siempre encontraba la forma de hacer cumplir todas sus promesas y por eso Luhan creería en él ciegamente porque en ese preciso momento noto algo que tal vez siempre había estado ahí, en ese momento se dio cuenta que él también era irrealmente feliz.