Cuando el nuevo día llegó lo primero que Luhan hizo fue correr al baño para ducharse antes de que Baekhyun lo hiciera, su compañero tardaba mucho cuando llegaba a ocupar el baño antes que él, fue una ducha rápida puesto que a diferencia de Baekhyun, él tan solo lavaba su cuerpo y cabello y no sé tardaba horas poniendo mil cosas sobre su rostro, se colocó su uniforme en el baño y luego de eso secó bien su cabello y lo peino hacia atrás en una coleta, no era obligatorio que tuviese el cabello corto pero si tenía que llevarlo bien peinado o recogido en horario de clases.
Se miró en el espejo una vez que sus anteojos estuvieron en su sitio y trató de sonreír pero la imagen era igual de fea que siempre, suspiró resignado a que nunca jamás iba a verse bien y salió de baño, su mirada se juntó por un pocos segundos con la de Baekhyun antes de que agachara su cabeza y se hiciera a un lado para darle espacio al castaño y que este entrara al baño, la puerta se cerró dejándolo solo, su celular sonó y casi grita pero al comprobar que no era nada del otro mundo corrió a ver quien le había enviado un mensaje, todos en la escuela tenían su número que usaban únicamente con el propósito de atormentarlo pero la realidad era que en su celular solo había tres números registrados, el de su padre, el de su abuela y ahora el más reciente, Sehun, era algo triste pero estaba bien así porque de esa forma sabia que cuando alguien de sus contactos le llamaba o enviaba un mensaje era por alguna emergencia y no cualquier cosa.
Tomó su celular algo preocupado porque pudieran ser malas noticias acerca de su padre o de su abuela, desbloqueó la pantalla para ver el nombre del contacto quedándose pasmado cuando vio el nombre del contacto en la pantalla.
“Sehun”
No entendía porque le enviaría un mensaje tan temprano, ¿le pasaría algo malo?, se preocupó inmediatamente por aquel pensamiento y se apresuró a ver que decía el mensaje sorprendiéndose más al verlo.
De: Sehun
Buenos días pequeña estrella, espero que tu día sea maravilloso, recuerda que prometiste venir a verme así que voy a esperarte ansioso.
Eso más una gran carita sonriente era el contenido del mensaje, una sonrisa se dibujó en sus labios mientras miraba la pantalla de su celular, sus días siempre eran un asco pero con ese mensaje que acaba de recibir ahora estaba muy animado, ya quería que las clases terminaran.
-¿Luhan?-habló Baekhyun repentinamente asustándolo y haciendo que casi dejara caer su celular.
-¿S-si?-tartamudeó nervioso llevando toda su atención a Baekhyun que lo miraba raro desde la puerta del baño.
-¿Estás bien?-le preguntó extrañado, era extraño ver a Luhan tan sonriente por la mañana de hecho eso jamás había pasado hasta ese momento, por lo general siempre que las mañanas iniciaban Luhan se veía miserable.
-S-sí-respondió asintiendo al mismo tiempo.
-Como sea-restó importancia y señaló a su escritorio-Dame mi acondicionador que está ahí-ordenó y Luhan de inmediato obedeció.
Baekhyun tomó lo que había pedido y volvió a encerrase en el baño sin molestarse siquiera en decir gracias pero no importaba porque Luhan estaba acostumbrado a eso, miró nuevamente su celular pensando en si debía contestar o no, ¿Sehun quería que contestara?, estaba dudoso pero al final tomó una decisión y contestó el mensaje, sus mejillas estaban más que rojas cuando por fin le dio enviar, sonrió algo avergonzado y guardó su celular en el bolcillo de su pantalón para por fin salir de la habitación rumbo a su primera clase.
Llegó primero que todos como era de costumbre, se acomodo correctamente en su asiento y sacó un libro mientras esperaba que el maestro llegara, el aula comenzó a llenarse de gente que Luhan se obligó a ignorar hasta que alguien le arrebató el libro que tenía, alzó la mirada asustado encontrándose con la persona que no quería ver nunca al iniciar clases.
-Así que Luhannie…-dijo despectivamente, sonreía pero no estaba feliz-¿Dónde fuiste todo el fin de semana?-preguntó Kris comenzando a pasar las hojas del libro desinteresadamente.
-Y-yo…es-estuve en m-mi habitación-habló tan bajo que el rubio apenas lo escuchó, su mirada siempre en el suelo cuando contestaba a las preguntas del rubio, mirar a Kris a los ojos siempre hacia que todo fuera peor.
-¿De verdad?-preguntó aparentando calma-Que extraño-suspiró dramáticamente-Es extraño porque los chicos y yo fuimos a visitarte para ver si querías salir a algún lado y no estabas-dijo, todos estaban en silencio esperando que Kris finalmente lo moliera a golpes y Luhan quería llorar, Sehun, quería verlo tanto entonces-¿Dónde estuviste entonces?-preguntó seriamente cerrando el libro de golpe haciéndolo temblar de miedo.
-Yo…yo…yo…-balbuceó nervioso cometiendo un grave error cuando su mirada se levantó mirando por unos cuantos segundos a Kris, la bajó raídamente pero era tarde, el rubio gruñó y Luhan supo que algo malo iba a pasarle.
Kris sujetó su cabello con fuerza estrellando su cabeza contra la dura madera de su escritorio, eso había dolido y seguramente iba a dejar marca, su respiración comenzó a acelerarse y gimió de dolor mientras Kris apretaba fuertemente su cabello, maldita sea, iba a llorara otra vez.
-¿Qué te he dicho de mirarme a los ojos marica de porquería?-escupió con asco.
-Señor Xi, Señor Wu dejen de jugar y ocupen correctamente sus lugares-ordenó el profesor mientras entraba, Kris lo soltó entonces no sin antes advertirle que se encargaría de él más tarde.
Luhan se acomodó en su sitio correctamente, agachó la cabeza quitándose los anteojos para retirar las pequeñas lágrimas que se habían escapando de su ojos, se acomodó sus anteojos subiendo la cabeza y lo primero que vio fue la mirada seria de aquel chico alto de cabello rojizo, Luhan agachó la mirada de inmediato al notar que lo miraba a los ojos, ya tenía mucho con Kris, no quería más problemas.
-Chicos, este es Park Chanyeol, se unirá a esta clase así que por favor sean corteses-indicó el profesor-Señor Park vaya y siéntese en el escritorio a un costado del señor Xi-ordenó el profesor señalando el lugar que había mencionado.
El alto pelirrojo caminó lentamente entre el pasillo que separaba los escritorios, todos los ojos estaban clavados sobre él mientras avanzaba, todos lo miraban menos Luhan, él ya no se atrevía a ver a las personas a los ojos porque tenía miedo de hacer algo incorrecto y conseguir más problemas, cuando escuchó la silla ser arrastrada se armó de valor y miró de reojo al pelirrojo que al notar su mirada le sonrió.
Luhan no regresó el gesto porque pronto él iba a arrepentirse de sonreírle, cuando todos le dijeran acerca de él Chanyeol lo iba a mirar con el mismo asco con que lo hacían todos, siempre era así.
Las clases avanzaron rápidamente y cuando fue hora del descanso Luhan aprovechó que todos estaban más interesados en conocer al chico nuevo que en verlo golpeado y humillado así que salió mientras nadie lo veía y corrió hasta la cafetería, varios profesores comían ahí a esa hora por lo que posiblemente si Kris lo encontraba no podría hacerle nada o por lo menos eso esperaba porque después de todo los profesores parecían odiarlo tanto como sus compañeros.
La suerte le había sonreído al final, faltaba tan sólo la mitad de tiempo para que terminará el descanso y no había ni rastros de Kris, se sentía afortunado aunque su alegría duró poco y antes de que pudiera reaccionar Kris lo había levantado de su asiento y lo sujetaba de la camisa logrando con su fuerza mantenerlo con sus pies un poco despegados del suelo, él lo miraba despiadadamente mientras él tan sólo podía retorcerse asustado bajo su agarre.
*****
-Sehun presta atención-exigió el mayor al notar como el peli plata no ponía atención a la clase y sólo miraba su celular.
-Lo siento hyung-dijo de mala gana haciéndolo suspirar.
-Como decía, los electrones...-Sehun no dejó de prestar atención nuevamente volviendo a mirar su celular.
De: Little Star.
Tú también ten un gran día, iré en cuanto mis clases terminen.
Una sonrisa se dibujó en sus labios antes de poder detenerla, Luhan era tan adorable, miró nuevamente a su hyung que dibujaba algo en la gran pizarra que había en la habitación que era utilizada como su salón de clases particular, resopló fastidiado mirando hacia la ventana donde pudo claramente apreciar los terrenos del internado EXODUS, tuvo una idea entonces, estaba muy aburrido y ya no quería seguir con sus clases por eso en lugar de seguir ahí haría algo mucho mejor.
-Voy al baño-informó y salió de la habitación sin molestarse en escuchar los regaños del mayor.
Se las ingenió para salir de la mansión y llegar a la bodega, ahí se cambió de ropa y una vez que todo su atuendo estaba listo atravesó el pasadizo a la escuela de Luhan, salió asegurándose de no ser visto y únicamente cuando estuvo seguro de que pasaría desapercibido comenzó con su trabajo, iba a buscar a Luhan para verlo.
*****
Sus ojos miraron con desesperación a todos lados en busca de algún profesor pero no había ninguno y sólo estaban todos los alumnos que veían todo con diversión, el primer golpe se estrelló sobre su rostro con tanta fuerza que lo envió al suelo, el agudo dolor punzó en su pómulo izquierdo además del ardor cuando las primeras lágrimas tocaban esa zona.
-¿Creíste que podías ocultarte de mí, Luhannie?-preguntó a la vez que volvía a empuñar su cabello.
-Por...favor-sollozó, los golpes pasados aún no sanaban y por el sabor a sangre sabía que la herida de su labio se había abierto nuevamente.
-¿Quieres que paré Luhannie?-preguntó con falsa ternura y como el idiota ingenuo que era asintió como pudo confiando en que el rubio lo dejaría ir-Escucharon, nuestra florecita quiere que me detenga, ¿qué opinan ustedes?-le preguntó a los alumnos que eran su audiencia.
-¡NO!-gritaron todos.
-¡Dale su merecido al desviado!-habló alguien al fondo.
-Queremos verlo llorar, por favor Kris oppa-pidió con un puchero una chica que se encontraba hasta enfrente.
-Sí me lo pides así, como decir que no-le sonrió a ella-Lo siento Luhannie, yo realmente quería dejarte en paz-dijo falsamente afligido.
Lo siguiente que Luhan sintió fue el duro plástico de la charola que anteriormente tenía su almuerzo ahora golpeando su cara haciéndolo llorar aún más por el insoportable dolor mientras se cubría su lastimado rostro, las risas de todos dolían aún más que los golpes pero a nadie le importaba eso, Kris rió también antes de darle una patada en el estómago sacándole el aire además de un grito de agonía que aumentaron las risas, iba a desmayarse.
-Oh vamos Luhannie, no te rindas tan fácil-habló Kris.
-¡DÉJALO YA!-gritó alguien y nadie reaccionó cuando aquella persona se lanzó sobre Kris-¡Luhan corre!-ordenó Baekhyun.
Luhan se arrastró hacia atrás tan rápido como pudo, miró a Baekhyun recibir un puñetazo y dudo en abandonarlo, no podía, por fin alguien lo defendía y no podía tan sólo dejarlo ahí para que Kris lo golpear en su lugar.
-¡Corre!-repitió jalando la camisa de Kris cuando el rubio trató de ponerse de pie para llegar a Luhan.
-Pe-pero...-¿qué debía hacer?, no sabía.
Kris arrojó a Baekhyun al suelo sin ningún esfuerzo, otro golpe iba hacia Baekhyun hasta que alguien lo detuvo, Luhan reconoció a Chanyeol antes de que el pelirrojo estrellara su puño en el rostro de Kris.
-¡Luhan corre ahora!-dijo el pelirrojo.
-¡Atrápenlo!-ordenó Kris.
Luhan no perdió tiempo en cuanto vio a los amigos de Kris moverse, se levantó de un solo salto y salió corriendo con todo lo que sus piernas daban, no se atrevía a mirar atrás aún cuando escuchaba a sus perseguidores tras él, dobló hacia la derecha en la biblioteca y al pasar por la puerta está se abrió y alguien sujetó su brazo obligándolo a entrar.
Luhan estaba a punto de gritar pero al ver quién era su voz se quedó atrapada en su garganta mientras sus ojos miraban asombrados al peli plata.
-Shhh-Luhan asintió.
Los tipos que lo perseguían hablaban afuera de la biblioteca, los escuchó alejarse y sólo entonces pudo volver a respirar con calma sintiéndose muy aliviado.
-¿Qué haces aquí?-preguntó entonces.
-¿Quién fue?-respondió con una pregunta, Luhan no comprendió al principio hasta que se dio cuenta que hablaba de los golpes.
-No es nada-susurró.
-¿Nada?-resopló molesto-Tu rostro está todo golpeado, dime quién fue-ordenó.
-Es-estoy bien además...no es como si tú...no puedes hacer nada-murmuró.
-Puedo devolverles cada golpe que te dieron, eso puedo hacer-aseguró.
Luhan apenas lo pudo creer, sus ojos se aguaron obligándolo a mirar al piso, en tan sólo un par de días había encontrado a alguien que en verdad quería defenderlo y ahora también Baekhyun y ese chico pelirrojo, no podía explicar lo afortunado que se sentía en ese momento.
-Te haces daño-murmuró Sehun acariciando apenas su labio inferior haciendo que se diera cuenta que lo mordía y estaba empeorando el daño.
-Gracias por está aquí-susurró, su cuerpo comenzó a temblar y no se detuvo hasta que el peli plata lo envolvió en sus brazos.
-Tranquilo, estoy aquí, voy a cuidarte-prometió estrechándolo un poco más fuerte.
Ya sabía, Luhan sabía que con él está seguro, nada iba a pasarle en tanto estuviera con Sehun, ese chico que se había autonombrado su guardián y que parecía no tener otro propósito más que protegerlo.
El sonido del timbre anunciando el término del descanso destruyó aquella agradable atmósfera que Luhan adoraba sentir, miró a Sehun sin querer despedirse y luego miró hacia la puerta, temeroso e indeciso.
-Yo debo...debo irme a clases-dijo de mala gana.
-No vayas-pidió él-Vayamos a otro lugar.
-Pero mis clases...
-No importan, acompañarme.
-Está...está bien-la verdad era que no quería ni podía decirle que no.
Sehun tomó su mano entonces y lo llevó fuera de la biblioteca y lejos de ella, Luhan no sabía a dónde se dirigían pero no importaba si iba con él, Sehun no iba a hacerle daño por eso no tenía de que preocuparse, entraron al edificio donde estaban los laboratorios, subieron las escaleras hasta una puerta que Sehun abrió sin problemas, Luhan sintió la brisa sobre su rostro mientras cruzaban la puerta que les daba libre acceso a la azotea del edificio, Sehun cerró la puerta dedicándole una sonrisa, Luhan también sonrió y sus ojos exploraron todo a su alrededor antes de buscar a Sehun una vez más, lo vio cenando en el suelo cerca de la puerta y caminó hacia él para sentarse a su lado.
No sabía que decir, sus dedos jugaban nerviosos con uno de los botones de su saco mientras pensaba en algo que decir, nada se le ocurría lo cual era normal, él era muy idiota cuando se trataba de charlar con alguien más, miró de reojo a Sehun, su hermoso rostro permanecía inmutable mientras la brisa lo acariciaba meciendo su cabello, era una imagen impresionante, él giró su rostro dándose cuenta entonces que estaba observándolo y lo único que atinó a hacer fue sonrojarse.
-Me gusta este lugar-comentó, Luhan asintió lentamente de acuerdo con él, su mirada todo el tiempo en el suelo sin intenciones de alejarse de él.
-¿Y...ese uniforme?-preguntó en un susurro.
Sehun estaba usando el uniforme del colegio y aunque lo había notado tan sólo unos segundos después de verlo en la biblioteca no había preguntado nada hasta ese momento y ahora tenía otra duda, las azoteas eran una zona prohibida para los alumnos y por lo general siempre estaban cerradas con llave pero Sehun había abierto aunque eso podía deberse a algún descuido pero raramente pasaba algo así.
-Lo tomé prestado-respondió encogiéndose de hombros-De esta forma podre venir a verte sin problemas-aseguró sonriente.
El rubor en las mejillas de Luhan se intensificó e igual asintió despacio, abrazó sus piernas contra su pecho ocultándose un poco tras ellas, Sehun lo miró enternecido por su adorable y tímida actitud pero no quiso avergonzarlo más.
-Recibí tu mensaje, gracias por responder-Luhan se sonrojó aún más, bueno, tal vez sí quería avergonzarlo más.
-De nada-susurró, Luhan intentó sonreír más ampliamente pero su labio partido lo hizo quejarse y reconsiderar aquello.
-¿Por qué te golpearon?-preguntó seriamente.
-Por...no hay una razón...sólo sucede-dijo y Sehun odio que lo dijera como si aquello fuera lo más normal del mundo, como si todo el mundo tuviera derecho a herirlo y como si él tuviese que aceptarlo sin más.
-No lo digas como si fuera algo que tan sólo deba pasar-pidió con el ceño fruncido.
-Pero...así es...todos esperan que suceda-explicó.
-Ya no más, no volverá a suceder-sentenció.
-¿Y qué podría hacer yo?, no puedo defenderme...ellos no...
-Corre a mí, no lo dudes Luhan, corre a buscarme, voy a protegerte-prometió.
-No podrás contra Kris...va a hacerte daño-dijo negando varias veces con la cabeza, no quería que él saliera herido.
-No lo hará, lo juro.
-Pero...
-¿Confías en mí?-cuestionó.
-Lo hago-respondió sin dudar.
-Entonces haz lo que te digo-pidió.
Luhan pensó que eso había sido como una orden, miró dudoso los ojos de Sehun pero ellos sólo prometían seguridad, ellos le decían que no había nada que temer, estaba bien si quería ir con Sehun, estaba bien si decidía que ya no quería ser lastimado, estaba bien tratar de querer detener todo eso.
-¿Luhan?
-Sí-asintió entonces-Lo haré...correré a ti-afirmó.
-Muy bien dicho-felicitó poniendo su mano sobre su cabeza para revólver su cabello notando entonces que Luhan lo llevaba amarrado.
-¿Pasa algo malo?-preguntó algo nervioso por la extraña e intimidante mirada ajena.
Sehun lo miraba curioso y sin decir nada le quitó las gafas para poder mirarlo mejor, su aliento se quedó atrapado en sus pulmones ante la imagen, con el cabello amarrado todo el rostro de Luhan estaba totalmente visible, su angelical imagen era algo indescriptible.
Sus delicados rasgos, su pequeña nariz respingona, sus delgados labios rosas pero sobre todo ese par de brillantes e impresionantes ojos claros que lo observaban con confusión e inocencia, su corazón se volvió loco entonces.
Sus mejillas se calentaron ligeramente y el pensamiento de lo agradecido que estaba de que nadie más pudiese ver lo hermoso que realmente era Luhan se repetía sin parar en su cabeza.
-¿Sehun?-habló el confundido chico.
-Tus gafas...tienen algo de suciedad...las limpiare-dijo en un murmullo, incluso lo había dejado sin palabras.
-Ya veo, muchas gracias-sonrió.
Sehun pensó entonces que el corazón iba a salírsele del pecho, no entendía porque se sentía así, no comprendía porque quería abrazar a Luhan para no dejarlo ir jamás, no entendía nada de lo que sentía cada vez que lo tenía cerca o simplemente lo escuchaba hablar, tal vez estaba volviéndose loco, tal vez estaba enfermo o tal vez...tal vez sentirse tan extraño y cálido era algo bueno.