Min Gyu estaba lívido. Sabía que Hoshi tenía un pasado. ¿Quién no? Pero el pasado de su pareja no tenía que estar de pie delante de él sonriendo.
Los dedos de Min Gyu se morían de ganas de sacar esa sonrisa socarrona de la cara del tipo.
—¿Qué pasa? —El hombre de las cejas oscuras se arqueó—. ¿Celoso?
Bueno, iba a golpear al tipo en el suelo. No había ninguna duda persistente ahora. Min Gyu dio un paso adelante, listo para mostrar a este arrogante humano lo que un lobo hacía para proteger a su pareja cuando la mano de Changjo se posó en su pecho, deteniéndole.
—Este es el primo de Ji Yeop el que estás a punto de incinerar.
Min Gyu gruñó mientras miraba a Won Woo. ¿Así que este era el hombre que los había dejado plantados dos veces cuando Min Gyu y Gong Chan habían ido detrás de él? Min Gyu escudriñó a Won Woo con una mueca de desprecio, dejando que el hombre supiera lo que pensaba de él.
Sus emociones estaban subiendo. Su ira se encendió, y estaba preparado para patear... Min Gyu se quedó inmóvil cuando olfateó el aire.
—Ahí está olfateando otra vez, —murmuró, cuando Hoshi dio otro paso hacia atrás, mirando entre los dos hombres. Min Gyu inhaló profundamente y luego sintió que su polla se endurecía y se le encogía el corazón al mismo tiempo. Este arrogante idiota era su segunda pareja.
¡Joder!
Min Gyu volvió a apretar los dientes mientras miraba fijamente a Won Woo. Incluso aunque él se sintiera aliviado de que Hoshi se hubiera acostado con su pareja, todavía no excusaba a Won Woo de actuar como un asno.
—Creo que tenemos que hablar, —dijo Ji Yeop cuando miró a su alrededor a todos los que estaban de pie en el vestíbulo—. Las cosas parecen estar poniéndose un poco tensas por aquí.
—Estoy bien, —dijo Won Woo cuando sonrió una vez más a Min Gyu.
—Pero yo no estoy tan seguro del impulsivo allí.
Uno... dos... tres... cuatro. Min Gyu tomó una respiración profunda, dejándola salir poco a poco. No iba a estrangular a su pareja. No, él no iba a hacerlo. Pero, maldita sea, si el hombre no estaba pidiéndolo.
—¿Soy libre de irme? —Preguntó Hoshi.
—¡No! —Dijeron Won Woo y Min Gyu al unísono.
Hoshi levantó las manos en el aire mientras miraba a Changjo. — ¿Puedo irme ahora?
Min Gyu disparó a Changjo una mirada fulminante. Sabía que estaba jugando con fuego mirando a su alfa de esa manera, pero nadie iba a interferir entre él y sus parejas.
—Adelante, —dijo Changjo cuando dio a Min Gyu una mirada desafiante. —Nadie te tiene prisionero aquí.
Hoshi se dirigió a la puerta, como si su culo estuviera en llamas. Min Gyu vio impotente cuando Hoshi cerraba la puerta detrás de él.
—¿Por qué hiciste eso? —Gruñó Won Woo a Changjo.
Incluso Min Gyu sabía que su pareja estaba siendo derrotada de una forma humillante. Dio un paso entre Won Woo y Changjo, rezando para que el alfa no le quitara el polvo a Won Woo. —El no sabe, —dijo Min Gyu a Changjo.
—Entonces mejor que aprenda, —advirtió Changjo mientras se alejaba, con la mandíbula apretada fuertemente.
—Puedo defenderme yo mismo. No te necesito para asumir mis batallas.
Won Woo escupía mientras caminaba hacia la puerta principal. Min Gyu se sentía como si le sacaran su maldito pelo. ¿Y él pensaba que todo sería un paseo después de lo de Jihoon?
Él debía haber estado jodidamente loco.
—Deja que se calme, —dijo Ji Yeop—. Won Woo tiene genio. Si dejas que se calme, verá la razón.
—Él no es el único que tiene temperamento, —espetó Min Gyu cuando se dirigió hacia la puerta. Tenía que asegurarse de que Hoshi estaba bien.
Todavía quería volver a esa maldita cárcel y dar una paliza a ese policía. Necesitaba patearle el culo a alguien que estaba dominándole fuertemente cuando cerró la puerta detrás de él. Estaba perdiendo rápidamente su capacidad de importarle de quién se trataba.
Min Gyu se quejó cuando vio a Won Woo apoyado contra la camioneta de Min Gyu. Este no era su día. —¿Te importa?
—No, en absoluto, —respondió Won Woo cuando hizo un gesto con la mano hacia el camino de entrada—. Pero si vas detrás de Hoshi, voy a ir también.
—¿Por qué? —Preguntó Min Gyu, mientras caminaba cerca de su camioneta, sus nervios de punta.
—Yo no tengo viaje de regreso a la ciudad, y puesto que has sido tan hospitalario, pensé que tal vez podría tomar uno contigo.
—Deja de pensar entonces, —dijo Min Gyu cuando agarró la manija de la puerta y abrió el lado del conductor, deslizándose hacia adentro, no le gustaba la actitud de Won Woo, y sólo porque fueran pareja no quería decir que tuviera que gustarle el hombre.
Won Woo era arrogante, engreído, y tenía una boca sabelotodo.
Min Gyu no estaba acostumbrado a que le hablaran de esa manera, y demonios, si su pareja iba a empezar. Le patearía en el culo antes de permitirle tratar a Min Gyu de cualquier manera. A él podían gustarle sus hombres con un poco de carácter, pero la actitud de Won Woo apestaba.
Min Gyu agarró el volante con tanta fuerza que sus nudillos se pusieron blancos cuando Won Woo subió en el lado del pasajero. —¡Fuera de mi camioneta! —dijo con los dientes apretados. Él tenía que recordarse a sí mismo que Won Woo era su pareja.
—Sólo dame un maldito paseo. Eso es todo lo que necesito.
Min Gyu podría pensar en algunas cosas más que necesitaba su pareja cuando arrancó su camioneta y se dirigió a la ciudad. Lástima que realmente no hiciera daño a su pareja porque Won Woo estaba así de cerca de ver simplemente qué harto estaba verdaderamente Min Gyu.
Young Bin no podía creer que Changjo le hubiera hecho propietario del Bar and Grill de Jungkook. Se había sorprendido como el infierno, pero no se estaba quejando. Había un montón de hombres elegibles que pasaban a través de las puertas, lo que significa un montón de culos. Él estaba muy a favor de eso.
Cuando Hoshi entró por la puerta, mirando a su alrededor antes de caminar hacia el bar y tomar asiento, Young Bin se quejó. Ese pequeño hombre iba a ser la muerte para él. El hombre bebía como un pez y era más problemático de lo que valía la pena.
Había días como estos en que deseaba que Jungkook estuviera alrededor. Pero el anterior dueño estaba por ahí con su pareja, viviendo la vida.
—¿Qué puedo hacer por ti? —Preguntó a Hoshi.
—Lo de siempre, —respondió el hombre con una mirada cansada. Hoshi no se veía en su habitual auto-despreocupación. Young Bin podría decir algo que molestaría al hombre. ¿Se suponía que iba a preguntar? ¿No eran los camareros asistentes psicológicos o una mierda así? Young Bin deslizó el vaso a Hoshi y esperó. Cuando el tipo no dijo nada, se encogió de hombros. Supongo que no quiere hablar.
Oh bueno, lo intentó.
Young Bin no era muy bueno en esa psicología barata de todos modos.
¿Qué consejo podía dar de todos modos? Estaba tan jodido de la cabeza como todos los otros soldados que vivían en la casa de Changjo. Puede que no haya sido tan torturado como Gong Chan lo había sido, pero todos ellos tenían sus pesadillas con las que hacer frente.
—Hazme saber si necesitas cualquier otra cosa, —dijo Young Bin mientras caminaba alrededor de la barra, encargándose de otro cliente.
Won Woo se sentó junto a Min Gyu, mirando a escondidas al hombre.
¿Cómo infierno podría alguien tan condenadamente caliente ser tan jodidamente molesto? A Min Gyu le dieron ganas de dirigir su puño en esa cara hermosa, pero al mismo tiempo meter la polla en la garganta del hombre. ¿Alguna vez había sido esto tan conflictivo antes? Ah, claro, con el culo caliente de Hoshi.
Won Woo sabía que era una mala idea venir a la casa de Ji Yeop, y ahora sabía por qué, el agravante hombre sexy junto a él. —¿Sabes dónde vive Hoshi?
Min Gyu le cortó una mirada antes de que él le diera un ligero movimiento de su cabeza. —Ni idea.
—¿Lo conoces, pero no sabes dónde vive? —Won Woo preguntó irritado.
—¿Sabes dónde vive todo el mundo a quien acabas de conocer?
—¿Tú sólo lo conociste? —Won Woo no estaba seguro de por qué, pero eso le cabreó. No estaba seguro acerca de muchas cosas últimamente, pero sabía que ceder a Hoshi se estaba convirtiendo en lo más duro que había tenido que hacer. Ya no quería comprender qué jodidas cualidades el hombre tenía para ayudar a quitarle las ganas de él. No, Won Woo quería saber qué grandes cualidades tenía Hoshi para encenderle. El hombre parecía haberse arrastrado dentro de él, tomando su residencia permanente.
—Sí.
—Entonces, ¿cómo diablos puedes reclamarle si lo acabas de conocer? Pensé que ustedes dos eran novios o algo así. —Won Woo apretó los puños en los muslos, enojado de que Min Gyu pudiera reclamar al hombre que quería, a un hombre que acababa de conocer. Ahora sabía exactamente qué posesivo Min Gyu era en realidad.
Pero Won Woo quería a Hoshi, y Min Gyu no podía tenerle.
Lo que le enfureció más que nada fue el hecho de que, tan molesto como Min Gyu estaba, Won Woo le quería también. La mierda no tenía ningún sentido para él.
—Porque sí, ¿de acuerdo?
—¿Qué clase de respuesta es esa? —Won Woo preguntó cuando se volvió hacia Min Gyu, mirando su perfil y sentir su polla comenzar a llenarse—. ¿Puedes ser un poco más específico? —Preguntó, mientras ignoraba el deseo que corría por sus venas por el hombre más irritante que alguna vez caminó sobre la tierra.
—En realidad no.
Won Woo pasó la mano por su cara, haciendo todo lo posible para no alcanzar y estrangular al hombre detrás del volante. Él no tenía necesidad de tener un accidente de coche. Pero sí quería respuestas. La mandíbula de Min Gyu estaba demasiado rígida para no tener una razón para su loco reclamo sobre Hoshi.
—Da detalles.
—No.
Won Woo golpeó el pulgar en el muslo, contando hasta diez muy lentamente... dos veces. —Él es mío.
Min Gyu le dio una risa ahogada desde su lado mientras negó con la cabeza. —Él es nuestro, Won Woo.
Won Woo podría haber jurado que oyó la palabra lamentablemente en la respiración de Min Gyu.
—Yo no comparto a mis hombres, Min Gyu. ¿Qué te hace pensar que dormiría contigo de todos modos? —Aunque la idea no era desagradable, nunca diría eso a Min Gyu.
—Debido a que...
—¿Eres uno de esos lobos?
Won Woo se agarró al salpicadero cuando el camión se desvió y luego de repente se paró, Min Gyu le miró boquiabierto. —¿Cómo?
—No soy tan tonto como parezco, —dijo Won Woo, mientras sus bolas se aflojaban.
Min Gyu dio a Won Woo una mirada que decía que tenía serias dudas de la afirmación de Won Woo. —Entonces deberías saber por qué Hoshi es mío.
—¡Él es mío!
—Si sabes algo acerca de lobos, como dices, entonces debes saber por qué tú eres mío también.
La mandíbula de Won Woo cayó y luego, lentamente, comenzó a sacudir su cabeza. —Jódete, —escupió Won Woo mientras se alejaba de Min Gyu. Él nunca pretendió saber nada acerca de los lobos, al igual que sabía que existían. Quería asaltar esa mirada arrogante, inmediatamente de la hermosa cara de Min Gyu.
—¿Es eso lo mejor que se te puede ocurrir?
Won Woo había tenido suficiente. Se bajó de la camioneta y cerró la puerta. Prefería caminar de regreso a la ciudad que tratar con Min Gyu durante otro minuto más. ¡El hombre le estaba conduciendo a la locura!
—Vuelve dentro, Won Woo. Sabes que es demasiado lejos para caminar.
Won Woo le mandó a Min Gyu a la mierda con el dedo, mientras comenzó su viaje a la ciudad. No le importaba si le llevaba hasta el anochecer. No iba a volver a la camioneta con ese gilipollas. Ese sexy, musculoso, caliente-como-el infierno gilipollas.
Maldita sea, Min Gyu estaba fastidiándola con su cerebro. Cuando Won Woo caminaba, Min Gyu rodaba lentamente a su lado. Podía oír a Min Gyu riéndose en el interior de la camioneta.
Nunca en su vida había querido estrangular y joder a alguien al mismo tiempo.
—Sube, Won Woo.
—Jódete, Min Gyu.
—Joder es una buena palabra. Me gustaría joderte ahora mismo.
La cabeza de Won Woo giró bruscamente cuando vio el brillo de lujuria en los ojos de Min Gyu. ¡El jodido hombre iba en serio!
—Ni siquiera si salvara la vida, —respondió.
—Podría salvar la mía.
Una sonrisa tiró de los labios de Won Woo, pero él no iba a dejar que Min Gyu la viera. El hombre estaba bastante molesto ya. Si supiera la forma en que afectaba a Won Woo, nunca escucharía el final de ello.
—Tú sabes que lo deseas.
—Difícilmente. —Sí que lo quería.
—Tus labios dicen que no, pero tu cuerpo sabe que quiere sentir que yo hunda las bolas profundamente en él.
Won Woo dejó escapar un pequeño gemido. ¿Qué diablos pasaba con este tipo? ¿Un minuto estaba echándole una bronca a Won Woo, el siguiente estaba sexualmente provocándole? El hombre tenía que ser bipolar o algo así.
Se detuvo y dio a Min Gyu una mirada desafiante. —Está bien, ven y chupa mi polla.
Oyó una risa desde el interior de la camioneta. —Tienes que traerla hasta mí.
¿En serio?
Won Woo sacudió la cabeza. No debería estar emocionándose ante la perspectiva, pero joder si su polla no estaba dura como un ladrillo. Miró por encima de Min Gyu, viendo al hombre mover las cejas. —¿Qué tienes tú tan malditamente agradable todo de repente? Estabas listo para arrancarme la cabeza, no hace tanto tiempo.
Min Gyu se encogió de hombros, cuando aparcó la camioneta y se deslizó a través del asiento, descansando el brazo en el marco de la ventana. —Somos pareja. Ya que no puedo matarte, entonces podría muy bien joderte.
A Won Woo le sonaba perfectamente lógico.
¡No, no lo es!
—¿Qué es una pareja? —Preguntó Won Woo, mientras caminaba cerca de Min Gyu.
—¿Un jodido amigo? —respondió Min Gyu—. ¿Ahora vamos a ser colegas o qué? Won Woo dio un paso más cerca. —No vas a joderme.
—¿Por qué no?
—Porque yo no estoy abajo. —Won Woo dio a Min Gyu una mirada afilada.
—Nunca.
—Veremos eso, —Min Gyu murmuró en voz baja mientras empujaba la puerta del pasajero abierta y luego se deslizó de nuevo sobre el lado del conductor.
¿Qué pasaba con los camiones y el sexo últimamente?
Al parecer, Won Woo estaba cada vez más en acción en los camiones que en su propia maldita cama. No es que él se quejara. Tal vez si empujaba su polla en la boca de Min Gyu, callaría al bastardo arrogante durante más de cinco segundos.
Won Woo sacudió la cabeza mientras volvía a subir a la camioneta y cerró la puerta.
continuara....