Rudolph es un vampiro de más de medio siglo de edad, es un chico serio pero con un buen sentido del humor, que por más de once años ha estado al lado de su mejor amigo, Antón. Las continuas pérdidas de su auto-control han hecho que se vaya alejando de Antón poco a poco… por no querer dañarle o regalare en una de esas pérdidas de cordura, la maldición que lleva su alma desde que nació.

Una noche al ir a visitar a su familia, él y su amigo tienen una pelea por falta de confianza… y Antón al alejarse e ir al bosque siente que lo acechan en sobre manera. Al pensar mejor las cosas, decide regresar a la casa de la familia de Rudolph cuando al girarse se encuentra con un chico de piel pálida que no es su amigo, si no, un completo desconocido… el chico se acerca amenazadoramente a él y le acaricia los cabellos diciéndole unas desagradables palabras. Los ojos del desconocido se tornan de un color rojo sangre muy alarmante, Antón se queda totalmente paralizado… el miedo había invadido su cuerpo

Y en el momento en que el monstruo se acerca a su cuello, abriendo su boca como si su quijada se fuera a zafar… ve como Rudolph aparece en instantes al lado de ellos y le da una patada con gran fuerza mandando a volar al otro rodando por la tierra y lodo.

El extraño se levanta lentamente del suelo, se sacude las ropas antiguas que vestía y les sonríe a ambos, diciendo que Antón era suyo… y que lo había visto primero, que le pertenecía. Rudolph solo pone a Antón tras el… y en una distracción siente como unas garras herían su rostro…

—     He dicho que el me pertenece— decía el vampiro torciendo su mano que estaba bañada en sangre

—     Sobre mi cadáver— Rudolph solo fruncía el entrecejo mientras sus ojos adquirían un tono rojo brillante

—     Como gustes…— El vampiro sonreía socarronamente y desaparecía en solo instantes

Este se lanzó de nuevo a Rudolph tomándolo por las costillas y encajando sus garras de una manera dolorosa, sacando un desgarrador grito del mayor y aventándolo contra uno de los viejos árboles que había cerca… desvió la mirada al pobre humano que estaba tirado en el suelo temblando del miedo, la sangre de Rudolph le había manchado la cara cuando este le daño el rostro al que ya hacia entre escombros, sentía como la sangre de Rudolph lentamente bajaba en pequeñas gotas hasta su barbilla y no hacía más que irse alejando a rastras en el suelo, cada que ese monstruo daba un paso hacia el… ¿qué tiene pensado para el pobre chico? ¿Qué ara Rudolph al respecto?

VAMPIROS, MALDICIONES, BRUJAS Y AMOR