"Bromas Pesadas y Malos Entendidos"
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Era una mañana muy hermosa en la ciudad de Konoha; el sol brillaba, las aves cantaban, el cielo estaba más azul de lo normal y en las calles las pocas personas que habían sonreían y se saludaban entre sí, claro que no en toda la ciudad puede haber tranquilidad, ya que en un no tan pequeño departamento se encontraba un joven llamado Uchiha Sasuke de veintidós años y recién graduado de la Universidad; de cabello largo hasta los hombros y de color negro azabache, piel blanca como la porcelana, y aunque no se veían sus ojos, por obvias razones, estos eran de color negro como la noche, y un cuerpo muy envidiable ante los varones de su edad.
El azabache estaba cómodamente durmiendo, sin darse cuenta de su entorno, sobre todo de que su amado novio ya se había levantado y que estaba parado a un lado de la cama y en su mano derecha tenía un frasco de espuma para afeitar y en la otra una pluma que había sacado de su almohada, este chico era Namikaze Naruto, de veintiún años y recién graduado de la Universidad; de cabello corto y alborotado de un color amarillo como los rayos del sol, piel ligeramente acanelada y con tres marquitas en cada mejilla que lo hacían ver como un travieso Kitsune, lo que más llamaba la atención eran sus ojos, tan azules como el mismo cielo, que más bien parecían un par de hermosos zafiros azules y un cuerpo muy envidiable ante todas las mujeres y todos los donceles, algo que a él no le gustaba, y más siendo varón.
Estos dos chicos se hicieron amigos desde que tienen memoria, pero al comenzar la Preparatoria, aquellos sentimientos de simple amistad cambiaron por unos puros y sinceros sentimientos de amor, así que se hicieron novios y hasta ahora lo siguen siendo, pero Naruto quiere ser más que eso, obviamente no lo va a decir cara a cara, eso es algo que su amado Teme debe hacer, o al menos eso es lo que el blondo piensa, así trata de llamar la atención de su novio, ¿y cómo lo hace?, fácil, le hace bromas pesadas a Sasuke. Justo como la que está a punto de hacer.
—“Ji,ji,ji, a ver si con esto te animas Teme” —, pensó el blondo mientras echaba un poco de la espuma en la mano derecha de Sasuke —. “¡Ahora va lo mejor!” —, pensó divertido para después pasar la pluma por la nariz del azabache.
Sasuke comenzó a sentir un cosquilleo en su nariz, así que movió su mano izquierda para quitar esa sensación, pero para su mala suerte no se detendría, ya que esa no era la mano que Naru quería ver moverse, así que el blondo continúo insistiendo.
—Sasuke se removía inquieto por esa terrible sensación que tenía en la nariz y sin darse cuenta movió su mano derecha y cuando lo hizo, su cara se llenó de espuma, haciendo que se despertara furioso —. ¡¡NARUTO!! —, grito furioso el azabache para después levantarse e ir al baño a quitarse la espuma de la cara —. Dobe ya te he dicho que dejes de hacerme esas bromas de muy mal gusto-dijo en tono serio el mayor.
—Teme lo que pasa es que no aguantas nada —, se quejó el menor mientras se cruzaba de brazos y hacia un mohín.
Sasuke ya estaba harto del comportamiento de Naruto, ya que desde hacía mes y medio atrás el blondo se comportaba muy extraño y le hacía bromas que ya lo tenían fastidiado y solo de recordarlas se enojaba mucho.
---FLASHBACK---
Era de noche y el azabache ya estaba profundamente dormido, pero despertó cuando su amado novio entró a la habitación corriendo y se veía muy asustado y nervioso.
—Sasuke hay alguien en la cocina —, susurró muy nervioso el blondo.
—El azabache se levantó y agarro un bate de béisbol, luego salió de la habitación para dirigirse a la cocina, y cuando llegó a la puerta miro hacia atrás y le regalo una sonrisa tranquilizadora a su novio —. Quédate aquí yo me encargo —, susurró el azabache para después abrir la puerta y entrar, pero al entrar le cayó un bote lleno de apestosa basura, quedando todo embarrado y apestoso —. ¡¡NARUTO!!—, grito furioso para después correr directo al baño mientras que Naruto se reía de su desgracia.
---FIN DEL FLASHBACK---
Esa era una de las muchas bromas que Naru le hacía desde hace mes y medio y ciertamente ya lo tenían harto, pero decidió olvidarlo y aprovechar su tiempo libre de las bromas del blondo lleno a trabajar.
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Naruto se encontraba en la habitación que compartía con Sasuke, con un aura totalmente depresiva y arrepentida.
—Creo que ya me pasé con las bromas —, suspiró totalmente abatido —. Será mejor que le diga las cosas de frente…y quien sabe tal vez reaccione bien —, susurró el blondo mientras se acariciaba su algo abultado vientre —. Aunque ese Teme es un tontito al no darse cuenta que he engordado un poco —, dijo con una enorme sonrisa.
---FLASHBACK---
Naruto iba de camino al hospital para hacerse un chequeo, ya que tenía aproximadamente dos semanas con muchos vómitos, mareos, náuseas y extraños antojos, aunque creía que estaba enfermo ya que cada vez que veía su amado ramen tenía que ir corriendo al baño y para hacer eso, el blondo se consideraba enfermo gravemente, cuando llegó al hospital le sacaron sangre y lo hicieron esperar dos horas y cuando paso el tiempo de espera el doctor que lo atendió llegó con los resultados y le sonrío, cosa que extraño al blondo.
— ¡Felicidades usted está embarazado! —, dijo el doctor con una sonrisa.
— ¿Cómo? —, preguntó el blondo sin creerlo —. Que yo sepa no soy un doncel —, susurró muy nervioso.
—Pues si lo es y la prueba es que usted tiene cerca de un mes de embarazo —, afirmó el Galeano en tono serio para que el blondo le creyera.
Después de recibir esa noticia el doctor le dijo todos los cuidados necesarios y le dio algunas vitaminas para que no tenga problemas durante el embarazo y ya terminando de recibir esas indicaciones, el blondo regreso a su hogar y cuando llegó fue directo a su habitación para después tirarse a la cama.
—No puedo creer que soy doncel —, susurró el blondo —. Y eso no es todo, también estoy embarazado y el Teme no me ha pedido matrimonio —, susurró muy triste por lo último, pero luego cambio esa expresión de tristeza por una llena de decisión y se levantó mientras ponía sus manos en su plano vientre —. Pero tu papá muy pronto me pedirá matrimonio porque tu papi no permitirá que tu papá se nos escape —, dijo el blondo como si en verdad estuviera hablando frente a frente con su bebé.
Después de ese día Naru comenzó a hacerle bromas pesadas a Sasuke.
---FIN DEL FLASHBACK---
Después de recordar el día que se enteró que era doncel y que tenía a un pequeño ser, fruto de su amor con Sasuke, creciendo lentamente en su vientre, se levantó de la cama y fue a la cocina donde preparo la comida favorita de Sasuke, luego acomodo la mesa y puso muchas velas para dejar un ambiente romántico.
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Sasuke por fin llegó a su hogar después de un largo día de trabajo, entró al departamento y cuando lo hizo vio todo oscuro y sospechosamente silencioso, suspiro esperando la broma de Naruto, pero esta nunca llegó, así que se dirigió a la cocina y cuando entró se sorprendió al ver la mesa decorada y con su comida favorita bien servida, pero lo que más lo sorprendió fue ver al blondo callado y tranquilo.
— ¿Y todo esto por qué? —, preguntó dudoso el azabache.
—Es que quería disculparme contigo por todas las bromas que te he hecho —, susurró Naruto muy nervioso.
—Te perdono, pero no lo vuelvas a hacer —, dijo el mayor mientras sonreía de medio lado.
—S…sí —, murmuró el menor muy sonrojado y apenado.
Los dos comieron muy felices y cuando terminaron se fueron a la sala a ver televisión, pero después de un rato Naru apago la tele y se puso muy nervioso, cosa que extraño y preocupo mucho al azabache.
— ¿Qué pasa Dobe? —, preguntó el azabache algo preocupado.
—Es que tengo algo muy importante que decirte —, hablo el blondo de manera muy nerviosa.
—Dímelo, sabes que siempre contaras conmigo —, pidió el azabache con una sonrisa tranquilizadora.
—Naruto suspiro —. Estoy embarazado —, reveló con los nervios de punta.
—El azabache se sorprendió, pero luego se enojó —. “Le dije que dejara de hacer bromas y ahora me sale con esto sabiendo que mi más grande deseo es tener hijos, pero esto no se quedara así, ahora es mi turno de hacerle la broma perfecta” —, pensó el azabache lleno de deseos de venganza —, Me alegro —, murmuró mientras sonreía levemente.
— ¿En serio? —, cuestionó el menor muy feliz.
—Sí —, fue la corta respuesta del mayor que estaba pensando la broma perfecta para desquitarse sin saber que estaba por cometer una de las mayores estupideces.
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Después de ese día de revelaciones y planes de venganza ya habían pasado tres días y desde ese entonces Sasuke evadía a Naruto o lo trataba de manera fría, cosa que deprimía al blondo.
Sasuke por su lado, ya había planeado la broma perfecta y para llevarla a cabo, llamo a Haruno Sakura, una chica de cabellos rosados y ojos color verde jade, la llamo y todo para que lo ayudara a cambio de una gran cantidad de dinero que la chica necesitaba y aunque odiaba a la peli rosa debido a que desde la preparatoria lo acosaba, la llamo porque sabía que Naruto la odiaba aún más, celos para ser más precisos, cosa que el azabache necesitaba.
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Finalmente llegó domingo, día de descanso de Sasuke, pero cuando el blondo despertó no encontró a su azabache novio, lo único que vio fue una carta, así que el tomo entre sus manos la carta, la abrió y comenzó a leerla.
«Te espero en el parque principal, junto a la fuente de los deseos, tengo algo muy importante que decirte y es urgente, ve bien vestido porque es algo de suma importancia.
Atte. Sasuke»
El blondo termino de leer y rápidamente aquella pequeña carta y se levantó de manera rápida para ir directo al baño, luego de asearse se puso una camisa blanca de mangas cortas y encima un chaleco anaranjado, un pescador negro muy pegadito que hacía resaltar las curvas de sus piernas, se puso unos tenis blancos y ya vestido se peinó lo más que pudo se perfumo y ya cuando termino de arreglarse se tocó su algo abultado vientre mientras una enorme sonrisa se dibujaba en su rostro.
—Al fin bebé, tu papá me pedirá matrimonio y los tres estaremos juntos —, dijo muy feliz el blondo para después salir con prisa hacia el parque.
Naruto iba con una sonrisa enorme en su rostro, pero al llegar al lugar donde su novio lo había citado, la sonrisa que traía se desvaneció, porque a lo lejos logro ver a Sasuke abrazando a la plasta rosa que tanto odiaba llamada Sakura y no la abrazaba de cualquier manera, sino que, de una manera cariñosa, cosa que molesto al blondo.
—Teme, ¿Qué crees que haces? —, preguntó muy molesto el blondo.
—¡Ah! Naruto llegaste —, hablo el azabache en tono frio.
—Pues sí…tú me citaste…y yo pensé que lo hiciste para que tú…—, el blondo se quedó callado y mirando a Sasuke con tristeza mientras se llevaba ambas manos a su vientre.
—Pues te cite para decirte que lo nuestro se acabó, yo no te amo…yo amo a Sakura y pronto nos vamos a casar —, comentó el azabache en tono frio, para después darle la espalda al blondo y abrazar a Sakura.
—Ante esto Naruto comenzó a llorar en silencio —. “Él no me ama…no nos ama…lo siento bebé…no podré cumplir la promesa que te hice” —, pensó el blondo con mucho dolor mientras acariciaba levemente su vientre.
—Sasuke creyó que ya era hora de terminar con la broma, así que volteo hacía Naruto con los ojos cerrados y una sonrisa arrogante en el rostro —. Bueno Naruto espero que hayas aprendid…—, pero no pudo terminar de hablar, ya que en ese momento abrió los ojos y vio el estado deprimente en el que había dejado a Naruto y se arrepintió mucho.
—El doncel estaba muy triste porque creía que Sasuke no lo amaba y peor aún, que no amaba a su hijo —. ¡¡TE ODIO!! —, grito muy dolido hecho un mar de lágrimas para después salir corriendo del lugar —. “No te preocupes bebé, yo te cuidare y nunca te abandonare como lo hizo tu papá…yo siempre te amare y estaré a tu lado” —, pensó el blondo con mucho dolor.
—En cuanto Sasuke vio el estado en el que quedo el blondo, supo que su broma había llegado demasiado lejos y quiso ir por él y explicarle las cosas, pero una mano lo detuvo, así que con furia encaro a la causante —. ¿Qué crees que haces Haruno? —, inquirió en tono frio el azabache.
— ¿Tú qué crees? —, soltó de manera sínica la peli rosa —. Déjalo ir, después de todo ese se lo merecía, así que déjalo y mejor quédate conmigo, después de todo yo sí puedo darte los hijos que tanto deseas y ese no, además tan desesperado esta que inventa un embarazo…eso solo demuestra que yo valgo más, es decir mírame, soy mucho, mejor —, dijo con cinismo —. ¿Qué me dices? —, preguntó la peli rosa en tono meloso mientras se colgaba del brazo del azabache.
—Sasuke pensó mucho lo dicho por la peli rosa, pero por alguna razón cuando recordó el estado en el que Naruto se fue, sintió que sí no iba por él, lo perdería para siempre, así que con ese pensamiento se zafo del agarre de Sakura —. Créeme Haruno que “ese” como tú le dices vale un millón de veces más que tú y sobre la broma pues ya te pagué, así que deja de fastidiarme y ve con otro a ofrecerle los “servicios” que me ofreciste porque a mí no me interesan, que tal si me contagio de algo —, dijo en tono frio para después irse con prisa y dejar a la peli rosa con las palabras en la boca.
— ¡Ojalá sufras mucho maldito Naruto! —, susurró con mucho odio la peli rosa.
Y como si fuera magia los deseos de la peli rosa se estaban a punto de convertirse en una cruel y dolorosa realidad.
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Naruto llegó al departamento que compartía con su amado Teme, que aunque el azabache no lo amara no significaba que el blondo tampoco, claro que por alguna razón había tenido leves dolores en su vientre, pero no les prestó atención y comenzó a empacar sus cosas y luego iba poniendo las maletas llenas en la sala para después regresar a la habitación y seguir empacando pero, de repente le llegó un fuerte dolor que hizo que caiga de rodillas, el dolor que sentía era tan fuerte que había comenzado a sollozar y doblarse de dolor.
—¡¡AHHH!! —, soltó un estridente grito lleno de dolor para después llevar ambas manos a su vientre —. ¿Qué…pasa bebé? —cuestionó con mucho trabajo mientras miraba hacia abajo, pero cuando lo hizo palideció al ver una mancha sangre entre sus piernas —. Mi bebé…yo…yo no quiero perderlo…bebé —, murmuró dolido y preocupado, mientras lloraba y trataba de levantarse, pero de repente todo se volvió negro.
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Sasuke llegó al departamento y suspiro, ya que ahora tenía que disculparse, pero no quería, ya que creía que Naru no se lo merecía, pero ni modos entró al departamento y cuando lo hizo vio algunas maletas y cajas llenas de las cosas del blondo, cosa que molesto mucho al azabache.
—“O sea, él me hace la peor de las bromas diciendo que esta embarazado, cuando ambos sabemos que no es doncel, aunque lo parezca y cuando yo me desquito, él se enoja y se va, pero esto no se va a quedar así” —, pensó el azabache molesto mientras se dirigía a la habitación —. Dobe estas llevando esto muy lej…—, pero no pudo terminar de hablar porque al entrar vio a su novio inconsciente sobre un pequeño, pero algo alarmante charco de sangre —. ¡¡NARUTO!! —, grito muy preocupado el azabache para después llegar donde el blondo y tomarlo entre sus brazos —. Resiste Naruto —, susurró el azabache muy preocupado mientras salía del departamento y corría para llegar a su auto.
Cuando llegó puso al blondo en el asiento trasero y luego subió el mismo al de conductor. Arranco el auto con prisa hacia el hospital.
Sasuke se pasó todos los altos, estaba muy preocupado por el estado en el que se encontraba el blondo, tanto que cuando llego al hospital ni se preocupó de estacionarse bien y bajo con prisa para después tomar a Naru con mucho cuidado entre sus brazos.
En cuanto entró al hospital y lo vieron, las enfermeras y un doctor que por casualidad pasaban por allí le arrebataron al blondo de las manos y se lo llevaron con prisa a urgencias, dejándolo solo y preocupado.
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Después de varias horas sin saber nada de su amado novio, Sasuke parecía un león enjaulado, nadie le decía el estado de gravedad en el que se encontraba el blondo y ya harto se levantó dispuesto a exigir respuestas, pero cuando iba a dar el primer paso vio que el doctor que se había llevado al blondo se le estaba acercando y su rostro parecía muy serio, cosa que lo preocupo y angustio.
—El doctor llegó donde Sasuke —. ¿Usted es familiar de Namikaze-san? —, preguntó el Galeano.
—Soy su novio —, respondió el azabache muy nervioso y con demasiada prisa —. ¿Cómo esta Naruto? —, cuestionó muy preocupado.
—Está estable, aunque nos costó mucho trabajo detener la hemorragia y gracias a esto deberá tener muchos cuidados, sobre todo por su estado —, explicó el doctor en tono serio.
— ¿Su estado? —, preguntó el azabache muy intrigado y preocupado.
—Sí, su novio es doncel y tiene casi tres meses de embarazo, aunque ahora deberá tener muchos cuidados, ya que lo que le paso, puede que haya sido un pequeño susto, tal vez por estrés o por algún disgusto, pero puede convertirse en amenaza de aborto, sino tiene los cuidados requeridos —, explicó el doctor —. Así que de ahora en adelante trate de que su novio no haga ningún esfuerzo o disgusto y que no esté bajo ningún tipo de estrés, por lo pronto puede pasar a verlo, está en la habitación 27, aunque por el momento se encuentra dormido, y por favor haga lo que le dije Uchiha-san —, comentó el doctor en tono serio para después retirarse dejando al azabache totalmente arrepentido.
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Cuando Sasuke escucho que Naruto era doncel y que estaba embarazado se puso muy feliz, pero cuando el doctor siguió hablando recordó todo lo que le hizo y dijo, haciendo que se sintiera como un verdadero bastardo, peor que eso, sabía que él era la causa de que Naru estuviera en el hospital y que pudo haber causado que su novio perdiera al bebé, fruto de su amor.
El azabache seguía sin creer que por su culpa, por su maldita culpa casi pierde a sus dos tesoros y si no hubiera llegado a tiempo jamás se lo hubiera perdonado. Decidió dejar esos pensamientos y buscar la manera de disculparse, pero ahora solo le importaba ver a Naruto, así que fue a la habitación que le dijo el doctor y cuando entro, le dio una punzada en el pecho al ver el estado de su novio, el blondo estaba muy pálido y ojeroso, se acercó y con mucha delicadeza tomo la mano del blondo, que a diferencia de otras veces estaba muy fría, cosa que lo hizo sentir aun peor.
—Dobe —, hablo quedito el azabache —. ¿Qué te he hecho? —, se preguntó muy arrepentido —. Todo por no creerte, todo por ser un estúpido orgulloso y vengativo, todo por una estúpida broma, pude perderlos a ambos…a ti y a nuestro hijo —, mencionó el azabache muy arrepentido mientras acariciaba el no muy abultado vientre —. De verdad soy un idiota, tanto que ni siquiera me di cuenta de que tu vientre ya había crecido —, susurró el azabache —. Jamás me hubiera perdonado si tú o nuestro hijo hubieran muerto —, murmuró para después tomar nuevamente la mano del blondo —. Si te hubiera creído ahora estarías regalándome una de esas sonrisas que me hipnotizan —, dicho esto, beso la mano del blondo.
—Al sentir que besaban su mano, el blondo abrió los ojos con pesadez y cuando vio de quien se trataba se alteró y le arrebato la mano —. ¡¡ALEJATE!! —, grito Naru mientras se alejaba del azabache.
—Naruto, tranquilízate, le hará mal a nuestro hijo —, pidió el azabache muy preocupado.
— ¿Nuestro hijo? —, inquirió molesto —. Querrás decir MI hijo, ya que tú preferiste a Haruno, así que lárgate y no regreses a nuestras vidas —, seriamente menciono aquello el blondo. Todo con mucho dolor en su destrozado corazón, mientras se abrazaba a sí mismo.
— ¡ES QUE YO NO AMO A ESA ZORRA! —, exclamó con furia —. Todo fue una maldita broma, porque creí que tú bromeabas otra vez, cuando dijiste lo del embarazo —, refutó el mayor desesperado mientras tomaba al menor de los hombros —. Yo debí creerte, debí confiar en que tú jamás harías una broma con ese tema…pero no lo hice y por mi culpa casi los pierdo a ambos —, susurró muy arrepentido mientras abrazaba al blondo —. Yo te amo, a ti y a nuestro hijo —, mencionó el azabache con completa sinceridad.
—Al escuchar eso, Naruto se alegró porque Sasuke si lo amaba, pero se enojó porque no le creyó lo del embarazo —. ¡¡TEME-BAKA!! —, grito muy dolido mientras golpeaba el pecho del mayor —. ¿Tienes idea de cómo me sentí? —, cuestionó furioso —. Creí que no me amabas y que nos dejarías —, murmuró el menor para después comenzar a llorar.
—Jamás haría eso, yo te amo y en verdad lamento mucho que todo esto hubiera pasado para poder creerte, pero creí que era otra broma y yo en verdad lo siento como no tienes idea…mi amor, ¿podrías perdonarme? —, preguntó el azabache muy arrepentido por todo lo que hizo.
—Te perdono porque yo también lamento haberte hecho todas esas bromas y porque también te amo y quiero que los tres estemos siempre juntos —, comentó el blondo con una sonrisa mientras se sobaba el vientre.
Sasuke le dio un apasionado beso a Naruto, quien correspondió gustoso y después de algunos minutos se separaron por falta de oxígeno y después de un rato recuperando el oxígeno, Naruto le contó a Sasuke la razón por la que hacía las bromas y Sasuke en cuanto supo la razón se sintió como un idiota por no haberse dado cuenta. Después de ese día Sasuke cuidaba mucho a Naruto y todos los días le hacía saber cuánto lo amaba, pero lo más importante es que por fin le propuso matrimonio y el blondo acepto muy feliz, aunque cuando vio el anillo pensó que era algo exagerado, ya que era un anillo de oro blanco y como adorno tenía el logo de la familia Uchiha, un abanico con rojo y azul y para darle brillo tenía piedras incrustadas y por eso el blondo llegó a la conclusión de que Sasuke era posesivo, pero sobre todo que lo amaba como loco y que no lo dejaría ir nunca de los nunca.
Después de ese día las bromas terminaron, después de todo ya no había razón para seguir haciéndolas.
FIN…ž°~