Tratando de no amarte, se ve tan lejano

Tratando de no necesitarte, me está desgarrando

No puedo ver el lado positivo, desde aquí en el suelo

Y solo sigo intentando, pero no sé para qué.

Porque tratando de no amarte, solo me hace amarte más.

(Nicelback – Trying not to love you)

Trafalgar tiene una vida, amigos, estudia en la universidad que siempre deseo lo que más le apasiona. Sin embargo una tarde se topa por azares del destino con un joven demonio de cabello rojizo.

Ese cuerpo ágil y hermoso le deja embobado. ¿Cómo actuar después de que quede a su completa merced?

La atracción es inevitable, la pasión es un sentimiento que quema.

Sentimientos que crecen en pantanos de  mentiras les unirán como lazos de seda con espinas…

Cada día es un lienzo nuevo para la suerte. En él dibuja y escribe con manchones negros y desordenados las escenas más ridículas, más sórdidas e hilarantes.
Todos y cada uno de sus trabajos tienen como musa al incomprendido, despreocupado y solitario Trafalgar Law, un simple estudiante.
Había podido vivir aceptando su condición y hasta agradeciéndola, eso hasta que aquella tarde, con el casino de la escuela repleto y tras un accidente… ¡Termina besando al chico con peor fama, Eustass Kid!
Desde ese día Trafalgar sentirá que la suerte dibujara una cuerda a su cuello y luego trazará cuatro líneas a sus pies, tocándole al pelirrojo y violento Eustass adivinar la palabra y salvar su vida ¿Qué peor suerte? ¿O tal vez, solo por una vez, la suerte le sonreía?